Saltar al contenido

Consulta 46

Y. , 40 años , de Colombia. 12/11/2010

Hola señora María:

Mi consulta es la siguiente: Tengo una sobrina de cuatro añitos, mi hermano, su papá es un borracho, cada vez que le pagan bebe hasta terminar con su sueldito y vive como con apariencia de que le tengan lástima por la niña. Y como la mamá se fue porque la echó, que era muy mala mamá como lo es el de papá, él le pegaba mucho a ella, un día hasta la puñalio en una pierna delante de la niña, y así sucesivamente.
La niña la cuidan por ahí vecinas de él hasta que se cansan porque no les paga, mis hermanas y yo la hemos cuidado pero no aguantamos mucho, pues llega a la madrugada a llevársela todo borracho y tras de él el hecho nos insulta y habla pestes de nosotras incluyendo a mi mamá, me da pesar con la niña, pero tenerla conmigo pone en riesgo mi hogar pues yo ya pasé por la lidia de un borracho que fue mi esposo y ahora que él cambió, no quiero volver a pasar por lo mismo con mi hermano, la diferencia es que mi esposo nunca me ha insultado.

Ya no tengo paciencia con los niños, tengo mucho resentimiento por los comentarios de él con las personas siendo que lo único que hemos hecho es ayudarlo, él lo que quiere es que yo le cuide la niña, se la vista, se la ponga a estudiar, pero todo gratis mientras él vive bueno y yo me encargo pues mi hija ya tiene trece años y se defiende sola. Yo lo que quiero saber es: ¿Tengo obligación de cuidarla o no? ¡Ah! mi mamá se la quiere llevar para el Amazonas donde ella vive con una hermana y no la dejo ir, dijo que ella donde tenía que estar era con él, eso es quererla? como dice él o es el amuleto para que todo el mundo le tenga
lástima?

¿Me puedes dar un consejo por favor?

DIOS la bendiga.


Respuesta de: María Durán de Bellido. 12/20/2010

Alma buena y paciente, sacrificada y llena de penas. Comprendo tus sufrimientos y todos estos pensamientos que me has comentado y dudas, acerca de lo que tienes que hacer con esta niña. Legalmente es una cosa, por Caridad es otra. Me imagino por un momento que ayudas a esta pequeña, como si vieras en ella al Niño Jesús, que la cuidas, la vistes, la enseñas y Dios te paga tu labor, todo tu trabajo y sufrimientos. Quizás incluso consigues que haciendo de ella una mujer decente como eres tú y tu hija, otro día ayuda a su padre, y así el mundo va cambiando con la ayuda de unos a otros. Pero claro, te hablo de sacrificio, de renuncias, de aguantar mucho dolor por las necias palabras de este hombre que también sufre lo suyo sin su esposa. A mí me parece que sí, que quiere a la niña; que quizás es lo único bueno que tiene en esta vida, no como tu que ya tu fe te da la paz y la serenidad de obrar bien.

Si puedes hacer el bien sin mirar a quien, ¡hazlo! Y dile a Dios que lo pones en Sus manos, y Dios te premiará en todo, quizás si tu esposo dejó la bebida fue por tu bondad, que la tienes y seguro que ayudaste a alguien, porque eres así de buena, por esto digo que Dios paga siempre, ¡y lo hace! Mira, tienes una hija de 13 años que ella sola se vale por sí misma, ¡esto es un regalo de Dios! Todo lo bueno que tenemos y que somos es un regalo de Dios.

Ayuda siempre que puedas, y aunque la vida es muy dura y este hermano tuyo te amarga la existencia, ¡confía en Dios que cambia a las personas para bien!, y utiliza de buenas personas como tú para ello, porqué Él, Dios, murió y resucitó, como vamos a resucitar todos en el Señor.

Sé que es muy duro y sufres mucho, pero Dios paga siempre, todo el bien. Acepta de Dios su pago aunque tu hermano no pueda pagarte, porque Dios paga más y mejor.

Eres una muy buena persona. Gracias por escribirme, rezo por la niña, por ti, tu hermano y toda vuestra familia.

Queda en paz.

 

Sección: Familiares

Consulta 45

S. , 46 años , de Argentina. 12/03/2010

Hermana querida, qué difícil es volver a escribirte, habiendo tantas peticiones tan importantes… Perdón por molestarte, mi hermana está pasando un momento muy complicado; su esposo, chef, debe ser operado de la columna en breve, ella, híper obesa, la acaban de despedir con el aval de mi marido, abogado, y retornaron sus ataques de pánico, era la que llevaba el sustento a la casa. Tiene 39 años y un hijo, se llaman: M, F y M.
Mi marido la pone más nerviosa y no sé si confiar en él, temo se esté vengando de mí y de mi familia, pero ellos confían?
Es muy exitoso, su fuerte es la peleo, pero no el de mi hermana y la pone peor. Tampoco le da explicaciones, nunca las da, y a cada rato me contesta, a mi sola, que si no le gusta se busque otro. Rezo por él, y lo sabes… pero se hace tan difícil, me culpo de haber dejado que se lo pidiera. No le importa nada y es capaz de dejarla en banda. Su situación es crítica, le gusta pelear e ir a juicio, y eso le hace mucho mal a mi B, además de no cobrar por mucho tiempo.
Hoy fue conmigo a Misa y estábamos re contentas, luego vino todo esto, y dice que siempre que se acerca a Dios viene lo peor, recién casi la internan, mi cuñado desbordado y mi sobrino angustiado. ¿Cómo la ayudo? ¡Si pudiera darle mi fe! Lo he intentado y se lo he dicho, y me contesta que no soy yo, que ojalá le resultara… Mi mamá tuvo un ACV hace 2 meses y está distanciada con nosotras porque la peleamos. Amen que dice que mi hermana es un desastre. Mi hna es muy buena y con un gran corazón…
Y mi marido en el medio, fui una tonta al pensar que la ayudaría. Lo siento tanto, ¿cómo reparo ese daño? Mis hijos cada vez más parecidos a él y yo más distanciada de todos, entendí que algún día si dios quiere, querrán mis valores y los acepten yo sigo igual, pero titubeo por momentos. Pido mucha fe y perdón, alegría en mi corazón y en mi rostro, ¡Cómo me cuesta sonreír! Paradoja cristiana, ¿no? Ruego por sus oraciones porque siempre me sostienen y confortan. Gracias. Gracias a Dios y a la Virgen por escucharnos y por existir. Los quiero mucho y están en mi corazón y en mi rezo. Que se haga su voluntad y al acepte con gratitud y alegría.

Bendiciones abundantes.


Respuesta de: María Durán de Bellido. 12/04/2010

Alma bendita, tú y todo el que lo desee puede escribirme siempre que quiera. He hecho voto a Dios Nuestro Señor de intentar aliviar al que sufre, pidiéndole siempre a la Virgen María para que interceda a Dios para que éste me conceda el don de Su Misericordia. Si en algo puedo ayudar, como yo tantas veces he necesitado y necesito ayuda y por la Divina Providencia, me llega, así quiero que cada alma tenga unas palabras de aliento siempre, lleno de fe, esperanza y caridad. Estoy aquí para serviros amig@s todos; herman@s en Cristo, por Dios y la Madre de Dios: María.

Cuando uno se acerca a Dios, es el diablo que no quiere y por eso actúa como lo hace siempre: poniéndonos tentaciones y ser su maldad, piedra de tropiezo. ¿Es que el demonio tiene poder? Sí, pero jamás más que Dios. Dios tiene más poder, y es Amor, y quiere ser amado y hay que amarlo por la fe. ¿Difícil?, para los débiles en la fe, para los que pasan por pruebas muy duras, y que tienen miedo, sí, puede resultarles difícil o no, puede que gracias a las fechorías del demonio se unan a Dios; vayan a Dios.

Dios necesita de tiempo. No temamos al tiempo, no nos sintamos derrotados por el tiempo, porque en un momento un alma puede cambiar. Confiemos en la Santísima Trinidad Un solo Dios.

Amiga mía, bendita tú por tu fe. Tu vida es dura, pero puedes con ello, porque tu corazón valiente está lleno del fuego del amor con que amas a Dios y a la Virgen María. ¿Ves como vas avanzando en la fe que vas proporcionando a otros? Sí, avanzas, aunque quisieras ir más rápido, pero te digo que avanzas. ¡No retrocedas tú en tu fe! Mantente firme en ella y piensa que todo es providencial incluso este fallo de tu esposo; te aseguro, que aunque no lo entiendas: es providencial. Algo bueno sacará Dios de ello. Quiero hacerte la observación de que los abogados normalmente suelen ser así, como es tu marido, sobre todo si es exitoso, porque no se ganan los pleitos sin gran esfuerzo. Fíate de él y dejadle hacer su trabajo. Es normal que a tu hermana, su clienta, le resulte difícil verlo como abogado. Hay que ser muy fuerte y duro y listo para aplicar la ley. Confiad en él. Él querrá hacerlo lo mejor posible, pero como no entendéis como él, pues… es normal que penséis lo que pensáis, pero no le des más vueltas y te diré que todos los asuntos de juzgados son como de “otro planeta”, allí se barajan otras normas a las que en la vida de relación social se suelen usar. Confía en tu esposo como buen abogado que es. Y que tu hermana no se asuste, ya te digo que la justicia es distinta a la “vida real”.

Ruego a Dios por todos los componentes de tu familia; sobre todo por ti, que eres la mano de Dios que los lleva y los llevará a la fe. No te enfades con nadie, y que vuelva la paz con tu madre; haz algo para ello: pídele alguna ayuda en algo, una información que ella tenga… y sobre todo acepta a cada uno como es; en el sentido de no lamentarte y sufrir en vano; que es sufrir en vano querer que sean como quieres y Dios quiere también. Tú da lo mejor de ti y Dios hará. Es maravilloso que tu hermana fuera a la Iglesia contigo. Comprendo que la vida está llena de dolor y habla con ella de esto, de que hay dolor tanto en los que tienen fe y van a Misa como a los que no tienen fe. Profundiza con ella y hablad de ejemplos de gente que conozcáis que tanto si tienen a Dios como si no: sufren. La diferencia está en que los que tenemos fe a pesar de sufrir tenemos la seguridad de que Dios nos ama, los que no tienen fe se piensan que todo lo que les pasa es un castigo, y viven atormentados; y no es así: Dios no castiga; ya castigo a nuestros primeros padres arrojándolos a la tierra junto con Satanás, este es el castigo: vivir con tendencia al mal, al pecado; el que no podemos fiarnos unos de otros porque como somos pecadores e imperfectos nos dañamos unos a otros cada dos por tres. Pero teniendo fe ¿qué cambia? El Amor que recibimos de Dios por los sacramentos, por la oración. Y cambia nuestra manera de ver y vivir la vida, aceptamos el sufrimiento, nos cuidamos más y mejor, por la fe y la moral cristiana, por la Comunión que es Dios en persona que viene y nos abraza, por la esperanza de que tenemos un destino después de la muerte que nos dará toda la felicidad que en este mundo, ni uno puede tener, porque el Reino de Dios no es de este mundo, sino que es del Cielo Eterno. Dile a tu hermana que las cosas de la vida, por fe, también pueden cambiar, porque hay milagros, milagros que son dados por la fe, que lea, léele como Jesús curaba y decía: “¿Qué quieres?… Tu fe te ha salvado… te ha sanado”. Háblale sin miedo de la verdad de la vida, y de que Dios Ama, y que aunque no hiciera milagros, que los hace, si nos unimos a Dios nos llena con su Amor, que nos da paz. Y que nos ayuda a hacer el bien y apartarnos del mal, y en hacer el bien ya hay la felicidad en la persona. Pregúntale si cuando se porta bien, si cuando hace el bien no se siente mejor. Dile que haga la prueba e invítala ha hacer la propuesta espiritual del P. Jesús que llama: “Vacaciones de Amor”. Aquí te paso el link;
http://www.catholicosonline.com/vacaciones_de_amor_a_Dios/index.html podéis hacerlas las dos. ¡Son una maravilla estos 15 días de vacaciones con Dios!

Dale tiempo a Dios y verás como tu familia, por ti, se acerca a la Iglesia y acoge la fe verdadera: la Católica, Apostólica y Romana. Tú, resiste. No dejes que las circunstancias te abatan y la fe se te duerma, ¡despiértala!, con tu voluntad. Eres una Gran mujer de fe. Eres la mano de Dios para tu familia y tus amigos. Dios confía en ti.

Gracias por escribirme.

Queda en paz.

 

Sección: Familiares

Consulta 44

G. , 40 años , de Colombia. 11/12/2010

Buenos días, Dios los bendiga por su obra. Soy madre de dos hijos, vivo con mis padres y con los niños, mi hijo mayor tiene 15 años y está muy rebelde dice que se va de la casa, está muy grosero, no ayuda y tiene muchos conflictos por la falta de respeto con mi mamá, no quiere a su hermanita quien viendo la actitud de él en ocasiones se torna
también grosera. De verdad que no sé qué hacer. Me duele mi mamá por el amor y la gratitud que siento hacia a ella pero también veo errores en ella que disparan o en ocasiones forzan situaciones que generan roces, no soy capaz de decirle que considero que algunas de las actitudes de los muchachos son su culpa o son reflejo de lo que ella misma es, pero sería para mí una falta de caridad con ella en sus condiciones de edad y salud.

Me duelen mis hijos porque los amo y ella habla de forma muy hiriente no se fija que sus palabras me pueden hacer daño a mí y lo que es peor hacer que los niños sean más rebeldes y se interioricen sus defectos como pasó conmigo. No sé qué hacer, los valoro, a mis padres y los quiero, quiero a mis hijos pero siento que me voy a enloquecer con el
clima de discordia que se respira en mi casa. Les pido por favor una opinión y en especial una oración por mi hijo mayor que me preocupa y por mi mamá que en su estado de ánimo actual le pueden más los rencores y odios que el mismo amor de Dios a pesar de rezar tanto yo la veo con muchos dolores en su vida físicos y emocionales muy antiguos que la hacen es que piense más en los defectos de los demás que en lo que pueden hacer bueno.

También lo que veo es que ella ve en mi hijo más al padre de él y el error que yo cometí, que al niño, y que siempre ha sido así por lo tanto para ella él simple hecho de mi hijo respirar es ya una ofensa para ella. No sé, estoy juzgándola sin saber realmente que hay en su interior, pero es duro, difícil y doloroso para mí la convivencia, el tratar de unir a una familia, mi padre con demencia, mi madre tiene cáncer un aneurisma y cansancio de la vida, mi hijo con su rebeldía su abandono y desamor por la vida, quedando mi niña con su intento de alegrar el día y su añoranza por su papá. Sé que un psicólogo sirve pero por mucho profesional que les consiga a mis hijos, para mí misma la situación de conflicto está asociada a mis padres y a ellos eso ya nos les funciona, sólo siento que necesito un milagro más de mi Señor.

Perdón la carreta pero es que no tengo con quien hablar y a quien contarle nada, y eso que es un resumen. Siento que me voy a enloquecer o que sé yo, yo digo todo el tiempo «todo lo puedo en Cristo que me fortalece» pero entonces porque me siento vacía con el corazón arrugado a punto de explotar con dolor intenso en el alma? Sé que Dios está conmigo pero que me perdone pero no lo siento. Gracias mil, sé que son muchos los mensajes que reciben y quien sabe si tendrán tiempo de leer el mío y quien sabe que habrá pasado cuando lo hayan leído.

Pero aún así gracias y un Dios les pague el haberme escuchado.


Respuesta de: María Durán de Bellido. 11/20/2010

Bendita alma triste y abatida. Hay un poco de todo en tu vida. Agárrate a esta cruz que te asemeja a Jesús, que también llevó la Suya, por todos nosotros.

No es nada fantástico este mundo, por muy civilizado que le digamos: mundo civilizado. Pero dentro de ti algo fantástico está punto de ocurrir, porque cuando una persona está “tocando fondo”, en ese preciso instante oye la voz de Cristo que te dice como a Lázaro: “levántate y anda”.

Levántate amiga mía, acéptalo todo, todo, sin juzgar a otros y pidiendo a Dios perdón por esos errores tuyos que te llevaron, quizás, al pecado. Ve a confesarte. Únete al que te Ama y tiene poder para cambiarte. Todos, todos a los que tanto amas, necesitan amor. Sí, tú también lo necesitas; por eso te mando con urgencia de prioridad a Cristo. ¡Ve a Cristo! Únete al que puede cambiar tu vida y la de los demás. Hay cosas, situaciones, circunstancias, esas que nos desbordan y que sólo se puede salvar la situación, metiéndose libremente en la Barca de Pedro: La Santa Iglesia Católica, porque Ella tiene algo distinto a las demás; tiene a Dios vivo viviendo en Ella por los sacramentos.

Tú, mi querida amiga, mi buena alma que tanto Dios Ama, tú no puedes con todo esto, ¡te desborda! Y es natural, porque sólo Dios sabe lo que hay dentro de los corazones de los que amas. Sólo Dios puede venir a tu vida y darle un giro espectacular y llenar de paz y alegría…, sí, he dicho alegría, tu vida: vuestra vida. Y tú te preguntarás: ¿cómo? Y yo te respondo mi buena hija, amada de Dios y de Santa María. Pues con tu unión con Cristo, el Dios que vive y habita en los sacramentos, ese Dios que se entrega a ti, por la Eucaristía en la Comunión. ¡Sólo Dios puede cambiar vuestra vida!; ¡sólo Cristo!

Lee el evangelio y disfruta de conocer a Jesús, ese Dios hombre bueno y misericordioso, que una y otra vez pregunta en las Sagradas Escrituras: “¿Qué quieres?” ¡Díselo!, díselo con la fuerza de la oración constante; como la viuda que iba al juez… ¡No pares de pedir! Y pide con el arma de la fe, con el Santo Rosario: Reza, porque la oración lo puede todo. También te pido una perfecta reconciliación con Dios, y cuando después de comulgar regreses a tu hogar, Cristo irá contigo, mientras no vuelvas a pecar, y se pecas, si vas contra los diez mandamientos de la Ley de Dios, te vas a confesar y vuelves a ir a recibirlo. Tente paciencia, y ten paciencia con los demás. Y haciendo lo que te he dicho, espera en Dios tu Salvador, y verás como las cosas cambian en tu vida, sencillamente porque en ella tendrás y llevarás a Dios. Tú, y tú familia necesitáis de Jesús y de la Virgen María. ¡Verás cómo cambia tu vida!, porque sólo tocando la túnica de Jesús, la mujer enferma sanó; pues imagínate, mi querida hija, las maravillas que puede darte Dios, Jesús, si vas a comulgar y lo recibes en tu corazón, en tu entendimiento, en tu casa, en tu hogar.

La culpa de todo, no es tu madre, ni tu pasado: es Satanás, que se ha empeñado en destruir a la familia. ¿Le dejarás? ¡No!, sé que no, sé que lucharás para cambiar las cosas malas de tu vida y lo harás con la Suma Bondad, que es Dios mismo que te llama desde el Sagrario y te dice: “Ven hija mía… ¿qué quieres de mí?”. Dile a Jesús lo que quieras, y perfecciónate con voluntad en todas esas grandes virtudes que tienes y que he visto plasmadas en cada palabra de tu escrito dirigido a mí. Se te ve tan buena. Rezo por ti.

… … … amén. (He rezado)

Queda en paz.

 

Sección: Familiares

Consulta 43

R. , 38 años , de Argentina. 11/4/2010

Hola, mi consulta es acerca de la caridad propia; nuestro Señor estableció el amor hacia uno mismo y al prójimo sin embargo, personalmente vivo una situación familiar donde no se vive esto, aún estando todos bautizados en la fe católica, por una u otra cuestión siempre surgen discusiones en mi entorno familiar y me frustro, porque pido ayuda, ya que sufro de una lesión en mi espalda y no la recibo aún para las labores básicas.

Me siento triste, porque intento mejorar mi comunicación, pero es como si nadie escuchara.


Respuesta de: María Durán de Bellido . 11/10/2010

Alma que sufre y necesita ayuda. Da y si no te dan, ofrece este dolor para que Dios ayude a los hombres a salvarse. Eso te lo digo para no desaprovechar tu dolor, alma santa.

Es difícil la vida entre católicos que van despistados de su fe, porque además a veces van de profetas y apóstoles siendo fariseos; pero esto también tenemos que vivirlo como lo vivió Jesús, para el bien nuestro. Hay que resistir y dar buen ejemplo. Hay que callar y orar, y por la oración Dios hace y hará. ¡Espera hija buena y fiel la ayuda del Señor que vendrá por tu oración buena y fiel a Él, a Dios, Dios de Amor!.

La vida es dura y difícil, así es, muchas veces, pero hay muchas personas que sufren además por su ignorancia de lo mucho que Dios las Ama. Tú, eso lo sabes, y ¡ERES SABIA!

Intenta no discutir y pide las cosas por favor, sigue rezando y aceptando la realidad, esperando con la esperanza en Dios, de que por tu bondad y oración, las cosas cambien para mejor. Pide a Dios que te sane. Dios es el dueño de todo; también de la salud. Pido yo por ti… … … amén. (He pedido)

Queda en paz.

 

Sección: Familiares

Consulta 42

s. , 44 años , de argentina. 7/9/2009

Angel de la guarda:eso eres para mi.gracias por oracion y consejo.ruego para que la preciosa sangre de nuestro señor jesus, nos proteja y convierta, por osvaldo, marta e ines que estan perdidos y desesperados,por mi esposo carlos y nuestra union, por mis hijos que se ven cada dia mas divididos por nosotros. pido perdon por esto, renuncie tanto de mi que ya no quiero hacerlo, pero temo se enfermen.Hablo verdades de el y son malas…pero callar todo me hace peor,quisiera poder ver solo lo positivo, intento y la realidad me supera y caigo otra vez.Gracias por sostenerme, lo siento. Bendiciones

Respuesta de: María Durán de Bellido . 7/9/2009

Alma bendita, todo pasará, se adaptarán a tu forma de ser, así somos los humanos, solo tienes que tener paciencia y reciedumbre. Todo está a tu favor estando con Dios.

Es difícil y doloroso, no te lo voy a negar, pero así nos enseñó nuestro Señor Jesucristo a callar y a llevar la Cruz, y los demás lo ven como vieron a Jesús. Si tienes ganas de llorar, llora, como lloró Jesús. Es preferible que llores a que grites. Si te cercan mucho, ‘enciérrate’ en un zas, y deja salir la caridad y piensa esto: Todo esto es asunto mío con Dios, y de cada uno de ellos con Dios. Al fin y al cabo es así, cada uno nos vamos a enfrentar a Dios y nos pedirá cuentas: Sólo Él: Cristo, el Mesías.

Piensa en los santos, en que ellos te comprenden y te escuchan, no estás sola, por la comunión de los santos, estás con ellos, son personas como tú, igual que tú, pero que ya están en el Cielo, allí donde vas a ir, y te estás ganando la plaza con este sufrimiento tan intenso.

Tú estás bien, eso recuérdalo siempre.

Y recuerda que cuando te atacan a ti en definitiva se atacan así mismos, porque tendrán que pasar ‘las cuentas’ de lo que han hecho y dicho, a Dios, a Jesús, cuando mueran. Así que teniendo eso en cuenta, no se lo pongas difícil, no sea que por ti y protegerte del daño que te hacen, luego te dañen más y pequen más y Jesús se ‘enfade’ más con ellos.

Calla y llora.

Reza y ora.

Sufre y padece.

Todo tendrá su fin y posiblemente con tu ejemplo ellos ablandaran a su conciencia y cuando la vida les alcance con alguna dureza, que por desgracia siempre hay, entonces se acordarán de ti, de rezar.

Dios quiere algo de ti, por eso lo permite. Tú más que yo, sabrás que puede ser ello, pero reza y reza y reza, para que pase de ti este cáliz, y pasará. Dios tendrá piedad de ti.

Me uno a tus lágrimas con mi oración a la Madre de Dios, para que aguantes y tengas fe en que todo es para un bien. ¡Aunque no lo sepas aún!, pero todo es para un bien para ti. ¡Seguro!

Por Dios, ten valor.

Dios te salve María, llena eres de Gracia, el Señor es contigo y bendita tú eres, entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre: Jesús; Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte amén.

Te quiero mucho y gracias por tu bondad hacia mí con tus palabras: Dios te las pague.

Queda en paz.

 

Sección: Familiares