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Abandónate en Dios

Abandónate en Dios

No te conformes de ir de la mano de Dios
cuando puedes abrazarle.

No te conformes en vivir
Cuando puedes y debes  vivir bien.

Si las estrellas y el sol no caen;
es porque Dios está detrás del gran engranaje.

¡Abandónate en Dios!

Y la paz vendrá a ti.

Tú solo no puedes dar de beber a todo el mundo.
Pero Dios puede hacer llover diluvios de amor,
paz y bondad.

Confíale tu vida a Dios,
dale tus latidos,
dale tu cuerpo,
dale tu alma.

Sé todo entero de Dios,
y Dios estará siempre en ti.

Deja que Él lo acapare todo.
Déjale que bese tu alma,
y ya nunca jamás querrás separarte de Él.

Montserrat Bellido Durán
© copyright

 

Sacrificio

Sacrificio

 

¿Qué ha sido del sacrificio?

¿Dónde lo han escondido?

Son pocas las personas que saben sacrificarse hoy en día.

Benditas serán por siempre estas personas que saben entregarse a los demás por cumplir con su deber.

No tengáis miedo al sacrificio, pues es de valientes y de personas enteras.

Las personas que son personas a medias nunca serán felices del todo.

Jesús nos enseña que se llega a la felicidad con el sacrificio.

Es bueno el sacrificio, bueno y sano.

El saber sacrificarse por Dios, ayudando a los demás ayuda a alcanzar la santidad, a ser generoso, saber amar a Dios sobre todas las cosas y personas, y amar al prójimo.

Ven,

¡No te escondas debajo de la mesa!

Ya verás.

Aprovecha las oportunidades que se te presentan a lo largo del día de poder sacrificarte por Dios ayudando a los demás, y ya verás qué contento te irás a dormir, y cuánto te querrán.

Haz la prueba.

Sé sacrificado.

Montserrat Bellido Durán
© copyright