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Puntos meditados - 12. página

CATECISMO MEDITADO por el P. Jesús

III. La interpretación del depósito de la fe – 85

 PRIMERA PARTE LA PROFESIÓN DE LA FE
– PRIMERA SECCIÓN «CREO»-«CREEMOS»
– 
CAPITULO SEGUNDO, DIOS AL ENCUENTRO DEL HOMBRE

Artículo 2  LA TRANSMISIÓN DE LA REVELACIÓN DIVINA

III. La interpretación del depósito de la fe 

El Magisterio de la Iglesia

85 «El oficio de interpretar auténticamente la palabra de Dios, oral o escritura, ha sido encomendado sólo al Magisterio vivo de la Iglesia, el cual lo ejercita en nombre de Jesucristo» (DV 10), es decir, a los obispos en comunión con el sucesor de Pedro, el obispo de Roma.

Meditación:

III. La interpretación del depósito de la fe 

El Magisterio de la Iglesia

Los obispos en comunión al sucesor de Pedro, el Santo Padre, obispo de Roma, son los que legalmente pueden interpretar auténticamente la palabra de Dios oral o escritura; así lo dice el Catecismo de la Iglesia Católica: los que están en comunión con el Papa, sólo estos, pueden interpretar auténticamente la palabra de Dios oral o escritura. Me ha gustado repetírtelo, y quiero que te quede claro. Tú, si eres laico o sólo sacerdote, no puedes interpretar auténticamente la palabra de Dios oral o escritura, tú tienes que decir lo que dice el Papa, como hace el Magisterio vivo de la Iglesia: los obispos en comunión con el Santo Padre, el cual lo ejercita en nombre de Jesucristo. Que te quede claro y que lo cumplas por tu bien y el bien de la Santa Iglesia. Porque es necesario estar a una con el Santo Padre si quieres salvarte, si quieres ayudar a Dios a salvar a otros. Es un pecado grave no estar unido al Papa en cuestiones de fe, y hay que propagar y enseñar la fe verdadera; si dudas en algo, por obediencia tienes que unirte a la fe, si quieres salvarte y que otros se salven. Porque muchos teólogos católicos no hacen esto, y es lo que deben hacer: estar a una con el Santo Padre. Todo lo que enseña el Papa en materia de fe, es lo único que se puede y se debe enseñar y aprender. Amén.

P. Jesús

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III. La interpretación del depósito de la fe – 86

 PRIMERA PARTE LA PROFESIÓN DE LA FE
– PRIMERA SECCIÓN «CREO»-«CREEMOS»
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CAPITULO SEGUNDO, DIOS AL ENCUENTRO DEL HOMBRE

Artículo 2  LA TRANSMISIÓN DE LA REVELACIÓN DIVINA

III. La interpretación del depósito de la fe 

86 «El Magisterio no está por encima de la palabra de Dios, sino a su servicio, para enseñar puramente lo transmitido, pues por mandato divino y con la asistencia del Espíritu Santo, lo escucha devotamente, lo custodia celosamente, lo explica fielmente; y de este único depósito de la fe saca todo lo que propone como revelado por Dios para ser creído» (DV 10).

Meditación:

III. La interpretación del depósito de la fe

Dios sabe que la vida del hombre en la tierra es corta, y quiere que aprenda rápido la Verdad, por esto la Santa Iglesia propaga y enseña la sabiduría de la verdad de la fe; y tú debes creer en lo que la Iglesia enseña, porque así lo ha dispuesto Dios mismo en Jesucristo al darle las llaves de la Iglesia a Pedro, y así tienes tiempo de aprender y practicar y salvarte, porque la vida del hombre sobre la tierra es corta, y Dios lo sabe, y te simplifica las cosas para que aceptando las enseñanzas del Papa, disfrutes de una vida de caridad, por la esperanza en la fe católica, la verdadera, la que Cristo vivió, enseñó y quiere que tú seas fiel a ella con toda tu vida, en toda tu vida, para que siempre vivas. Amén.

P. Jesús

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III. La interpretación del depósito de la fe – 87

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CAPITULO SEGUNDO, DIOS AL ENCUENTRO DEL HOMBRE

Artículo 2  LA TRANSMISIÓN DE LA REVELACIÓN DIVINA

III. La interpretación del depósito de la fe 

87 Los fieles, recordando la palabra de Cristo a sus Apóstoles: «El que a vosotros escucha a mi me escucha» (Lc 10,16; cf. LG 20), reciben con docilidad las enseñanzas y directrices que sus pastores les dan de diferentes formas.

Meditación:

III. La interpretación del depósito de la fe 

Tú, que eres parte de la Iglesia Católica, tú tienes el deber, la obligación de creer, no sólo por fe, sino con toda tu voluntad y esfuerzo tuyo a que así sea, el aceptar dócilmente las enseñanzas y directrices del Magisterio vivo de la Iglesia: los obispos en comunión al Papa. No te creas más inteligente ni de más fe, porque la obediencia al Papa es sinónimo de fe plena en lo que Cristo enseñó a los Apóstoles y que quiere Dios Padre que hagamos. Vive tu fe y vive feliz de creer y de aceptar toda tu fe. La alegría está en la obediencia de la fe, con la esperanza y obrando siempre con todos, por caridad. Esa es tu alegría, que hagas feliz a Dios Padre que te dio la vida y, por la obediencia fiel de Cristo, eres salvado por el mismo Dios Hijo, Jesucristo.

P. Jesús

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III. La interpretación del depósito de la fe – 88

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CAPITULO SEGUNDO, DIOS AL ENCUENTRO DEL HOMBRE

Artículo 2  LA TRANSMISIÓN DE LA REVELACIÓN DIVINA

III. La interpretación del depósito de la fe 

Los dogmas de la fe

88 El Magisterio de la Iglesia ejerce plenamente la autoridad que tiene de Cristo cuando define dogmas, es decir, cuando propone, de una forma que obliga al pueblo cristiano a una adhesión irrevocable de fe, verdades contenidas en la Revelación divina o también cuando propone de manera definitiva verdades que tienen con ellas un vínculo necesario.

Meditación:

III. La interpretación del depósito de la fe

Los dogmas de la fe

Los dogmas, hijo, hija de Dios, por la fe en Cristo, Dios Hijo, Hijo de Dios y de María Santísima, Virgen Inmaculada, son para tu bien, para el bien de toda la Iglesia Santa, porque a veces, Satanás, puede hacer dudar de la fe; y sabiendo esto, la Madre Iglesia, que como madre buena quiere tu salud, santidad y salvación, te pide obediencia de fe para los dogmas de la Iglesia. Tú cree la Verdad que viene de Dios y que está expuesta como dogmas de la Santa Madre Iglesia Católica. No dudes. En vez de dudar, estudia la verdad, analiza con sentido común la fe, basándote en el amor con que Dios te ama, ama a la Santa Madre Iglesia Católica, a todos los bautizados, a todos los que hacen lo que Dios, Cristo, pidió: que comieran su Cuerpo y bebieran su Sangre, para poder salvarse. ¡Sálvate por la fe! Cree los dogmas de la fe. Amén.

P. Jesús

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III. La interpretación del depósito de la fe – 89

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CAPITULO SEGUNDO, DIOS AL ENCUENTRO DEL HOMBRE

Artículo 2  LA TRANSMISIÓN DE LA REVELACIÓN DIVINA

III. La interpretación del depósito de la fe 

89 Existe un vínculo orgánico entre nuestra vida espiritual y los dogmas. Los dogmas son luces en el camino de nuestra fe, lo iluminan y lo hacen seguro. De modo inverso, si nuestra vida es recta, nuestra inteligencia y nuestro corazón estarán abiertos para acoger la luz de los dogmas de la fe (cf. Jn 8,31-32).

Meditación:

III. La interpretación del depósito de la fe 

Los dogmas van contra el pecado, y los que no aceptan los dogmas viven en el pecado, porque las tinieblas no soportan la luz.

Cuando tu vida espiritual es clara, los dogmas de la Santa Madre Iglesia te ayudan a vivir esta vida con total profundidad.

Acercarse a la Iglesia Católica y aceptar el Catecismo de su fe, de la misma fe de Dios, lleva al hombre, a la persona, por una vida de alegría, la alegría de saber, de comprender, de aceptar la verdad. Es como el niño que acepta de sus padres todo lo que le enseñan para mejor vivir una vida plena con todas sus consecuencias. Unos buenos padres enseñan para que el hijo tenga éxitos en la vida, y para que pueda sobrellevar los fracasos temporales, mientras la fe va creciendo gracias a los éxitos y a los fracasos. Todo es para un bien del que está bien educado, para el que sabe.

No temáis a los dogmas, es más, amadlos, porque ellos os hacen ver las cosas con total claridad. Fíate de la Iglesia, del depósito de la fe. Cree y vivirás.

P. Jesús

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