La unión hace la fuerza Únete a alguien maravilloso, Y… Únete a Dios. Y Él te hará maravilloso, Porque quien mira a los rayos del Sol, ¿Necesitas Fuerza? Únete a Dios. Ve a Jesús. Dile, cuéntale lo que quieras. Únete a Él. Y serás el Más fuerte, Por conocer las maravillas del Amor de Dios. Montserrat Bellido Durán
|
Montserrat Bellido Durán - 20. página
Dios ha apostado por ti
Dios ha apostado por ti Dios ha apostado por ti, Dios tiene su amor puesto en ti. Para que puedas ser por siempre feliz en el Cielo, Apoyándote en el ejemplo de Jesús, Con la ayuda de la fe, ¡Ánimo Amigo! Jesús te quiere Santo: Feliz. Montserrat Bellido Durán
|
Ayúdate a ti mismo
Ayúdate a ti mismo Ayúdate a ti mismo. Sé valiente. Aprende a vivir solo. Porque solo vienes al mundo, y solo te irás de este mundo. Siempre solo con Dios. Sonríe, Dios te ama. Dios te enseñará a vivir solo con Él. Entonces, cuando muera tu cuerpo y viva tu alma, no tendrás miedo, porque siempre habrás vivido sólo por y con Dios. Vive pensando solamente en Dios, y así vivirás de verdad, en la tierra y en el Cielo Eterno. Así te ayudarás a ti mismo, cuidarás de tu ser, de tu alma… Y serás solamente de Dios. Ayuda a Dios con tu amor ayudar a los demás; y te ayudarás a ti mismo. Sólo Dios basta. Montserrat Bellido Durán
|
Dar buen ejemplo
Dar buen ejemplo Es fácil juzgar los actos de los demás, señalarlos con el dedo, y hablar mal de ellos… ¿Y tú? ¿Das buen ejemplo? Da buen ejemplo. Así con silencio, sembrarás huellas de santidad. Y los demás, cuando vean tus silenciosas pero firmes pisadas; las oirán en su corazón. Su conciencia hará “tilín” y muchas despertarán por tu ejemplo. ¿Cómo dar buen ejemplo? Imitando a Jesús. Imítalo. Cópialo. Sigue el ejemplo de Jesús. Conócelo bien leyendo su vida en el Santo Evangelio. Entonces, por conocerle, podrás imitarle y siguiendo su ejemplo; DAR BUEN EJEMPLO. No te quedes a medias. Da buen ejemplo. Montserrat Bellido Durán
|
También tu alegría
También tu alegría Solemos acordarnos de ofrecerle a Dios la cruz, el dolor… pero, ¿Por qué a veces olvidamos ofrecerle también la alegría? No hay que ofrecerle sólo los malos momentos, dale a Dios también tu alegría. Cuando estés contento, cuando tu alma vibre de alegría, ofréceselo a Dios, comparte con Él tu Santa alegría. Pues Dios se alegra de tu felicidad y desea tu alegría. Hazle cómplice de tus buenos momentos, hazle compañero de toda tu vida… No te acuerdes de Dios sólo en el dolor, que Dios quiere vivir contigo toda tu vida. Vive, alégrate, santifícate cogido de la mano con Dios. Agradécele TODO lo que tienes. Coméntale tus sueños. Pídele en tus oraciones. Dile que le amas. Dale a Dios también tu alegría. Montserrat Bellido Durán
|