Envío diario
Envío diario nº 5.729- Miércoles 20-3-24
¿Quieres recibir el Evangelio diario GRATIS? Suscríbete AQUÍ
Miércoles 20 de Marzo de 2.024
Tiempo de Cuaresma
Misal virtual de hoy AQUÍ |
Evangelio:
San Juan 8, 31-42
Cumplir la palabra de Dios, Jesús
31Jesús decía a los judíos que habían creído en Él: Si permanecéis en mi palabra, seréis en verdad discípulos míos, 32y conoceréis la verdad, y la verdad os librará. 33Respondiéronle ellos: Somos linaje de Abraham, y de nadie hemos sido jamás siervos; ¿cómo dices tú: Seréis libres? 34Jesús les contestó: En verdad, en verdad os digo que todo el que comete pecado es siervo del pecado. 35El siervo no permanece en la casa para siempre; el hijo permanece para siempre.36Si, pues, el Hijo os librare, seréis verdaderamente libres. 37Sé que sois linaje de Abraham; pero buscáis matarme, porque mi palabra no ha sido acogida por vosotros. 38Yo hablo lo que he visto en el Padre; y vosotros también hacéis lo que habéis oído de vuestro padre. 39Respondieron y dijéronle: Nuestro padre es Abraham. Jesús les dijo: Si sois hijos de Abraham, haced las obras de Abraham. 40Pero ahora buscáis quitarme la vida, a mí, un hombre que os ha hablado la verdad, que oyó de Dios; eso Abraham no lo hizo. 41Vosotros hacéis las obras de vuestro padre.
Dijéronle ellos: Nosotros no somos nacidos de fornicación, tenemos por padre a Dios. 42Díjoles Jesús: Si Dios fuera vuestro padre, me amarías a mí; porque yo he salido y vengo de Dios, pues yo no he venido de mí mismo, antes es Él quien me ha enviado.
Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944)
«Palabra del Señor»
«Gloria a ti Señor Jesús»
Meditación:
Cumplir la palabra de Dios, Jesús
No vayas de listo, y cumple con lo que Dios, Jesús, enseñó y está escrito en los evangelios.
No peques más, ¡sé libre!
Vive pensando en lo que puedes controlar, y es NO PECAR.
Desea vivir en Gracia Santificante, y Dios, Jesús, te ayudará. ¡Seguro!
P. Jesús
© copyright
— Consejo nº 1.772 —
.-Ten una esperanza viva, la de obrar por lo que ya esperas y vendrá.
P. Jesús
© copyright
San Daniel, Profeta
Los datos acerca de este santo los sabemos por el libro de Daniel, en la S. Biblia. Pertenecía a una familia importante de Jerusalén. Era muy inteligente y estudioso y de agradable presencia. Cuando el rey Nabucodonosor invadió a Jerusalén se lo llevó prisionero a Babilonia junto con otros jóvenes. Al darse cuenta de las cualidades de este adolescente, Nabucodonosor lo hace instruir en todas las ciencias políticas y sociales de su país.
Los enemigos de la religión acusaron a Daniel porque tres veces cada día se arrodillaba en la azotea de su casa a adorar y rezar a Dios. En castigo fue echado al foso donde había leones sin comer. Pero Dios hizo el milagro de que los leones no lo atacaran, y esto hizo que el rey creyera en el verdadero Dios. El joven se abstenía de tomar bebidas alcohólicas y de consumir alimentos prohibidos por la Ley de Moisés, y Dios en cambio le concedió una inmensa sabiduría, con la cual logró escalar los más altos puestos de gobierno hasta llegar a ser primer ministro bajo los gobiernos de Nabucodonosor, Baltasar, Darío y Ciro.
A su gran sabiduría, a su habilidad para gobernar y a su santidad debe él que a pesar de los cambios de gobierno lograra conservar su cargo durante el reinado de cuatro reyes. Daniel recibió de Dios la gracia de revelar sueños y visiones. Daniel fue un profeta tan estimado que pudo corregir a los mismos jefes de gobierno de su tiempo y sus correcciones fueron recibidas con buena voluntad. Ante el pueblo apareció siempre como un hombre iluminado por Dios y de una conducta ejemplar y como un creyente de una profunda piedad y devoción.
Fuente: ACI Prensa
Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús
San Daniel, Profeta
Conducta ejemplar era la de san Daniel, profeta. Pero la conducta ejemplar la tenía antes de ser santo y de ser profeta y consejero de reyes; precisamente fue por su conducta ejemplar que llegó a ser santo, a codearse con reyes y a ser profeta.
Tu conducta debe ser ejemplar, y serás santo, y Dios te dará sus dones, y el mundo contará contigo para hacer cosas grandes.
P. Jesús
© copyright
Envío diario nº 5.728- Martes 19-3-24
¿Quieres recibir el Evangelio diario GRATIS? Suscríbete AQUÍ
Martes 19 de Marzo de 2.024
Tiempo de Cuaresma – Solemnidad de San José, Esposo de la Bienaventurada Virgen María
Misal virtual de hoy AQUÍ |
Evangelio:
San Mateo 1, 16.18-21.24a
Cuando Dios te inspira
16Jacob engendró a José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, llamado Cristo.
18La concepción de Jesucristo fue así: Estando desposada María, su madre, con José, antes de que conviviesen, se halló haber concebido María del Espíritu Santo. 19José, su esposo, siendo justo, no quiso denunciarla y resolvió repudiarla en secreto. 20Mientras reflexionaba sobre esto, he aquí que se le apareció en sueños un ángel del Señor y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir en tu casa a María, tu esposa, pues lo concebido en ella es obra del Espíritu Santo. 21Dará a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús, porque salvará a su pueblo de sus pecados.
24aAl despertar José de su sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado.
Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944)
«Palabra del Señor»
«Gloria a ti Señor Jesús»
Meditación:
Cuando Dios te inspira
Todo lo bueno que quieres hacer, todo lo santo, esto es inspiración divina, sobre todo, cuando es hacer un bien a otro-s; ¡nunca dejes de hacer el bien!, y verás que la paz de tu buena conducta, te ayuda a comprender a los demás; y con el tiempo, te darás cuenta de cómo actúa la Divina Providencia.
Recuerda a San José, que siempre actuó bien y se ocupó de la Virgen María, Madre de Dios, y de Dios Hijo, el Bebé que nació en Belén, ese Niño Dios que necesitó de otros, como tú necesitas de los demás, y los demás necesitan de ti.
Aprende a servir con bondad, la bondad de la Paz de Dios.
P. Jesús
© copyright
CONSEJO DEL DIA del P. Jesús
PARA TU SANTIDAD.
Te interesa si quieres ser feliz.
— Consejo nº 1.771 —
.-Las depresiones, muchas, se curan con la esperanza, con los sacramentos y la oración.
P. Jesús
© copyright
San José, Casto Esposo de la Virgen María
En el Plan Reconciliador de Dios, San José tuvo un papel esencial: Dios le encomendó la gran responsabilidad y privilegio de ser el padre adoptivo del Niño Jesús y de ser esposo virginal de la Virgen María. San José, el santo custodio de la Sagrada Familia, es el santo que más cerca está de Jesús y de la Santísima de la Virgen María.
San Mateo (1,16) llama a San José el hijo de Jacob; según San Lucas (3,23), su padre era Helí. Probablemente nació en Belén, la ciudad de David del que era descendiente. Al comienzo de la historia de los Evangelios (poco antes de la Anunciación), San José vivía en Nazaret.
Según San Mateo 13,55 y Marcos 6,3, San José era un «tekton». La palabra significa en particular que era carpintero o albañil. San Justino lo confirma, y la tradición ha aceptado esta interpretación.
Nuestro Señor Jesús fue llamado «Hijo de José», «el carpintero» (Jn 1,45; 6,42; Lc 4,22).
Como sabemos no era el padre natural de Jesús, quién fue engendrado en el vientre virginal de la Virgen María por obra del Espíritu Santo y es Hijo de Dios, pero José lo adoptó amorosamente y Jesús se sometió a él como un buen hijo ante su padre. ¡Cuánto influenció José en el desarrollo humano del niño Jesús! ¡Qué perfecta unión existió en su ejemplar matrimonio con María!
Modelo de silencio y de humildad
Las principales fuentes de información sobre la vida de San José son los primeros capítulos del evangelio de Mateo y de Lucas. En los relatos no conocemos palabras expresadas por él, tan sólo conocemos sus obras, sus actos de fe, amor y de protección como padre responsable del bienestar de su amadísima esposa y de su excepcional Hijo. Es un caso excepcional en la Biblia: un santo al que no se le escucha ni una sola palabra. Es, pues, el «Santo del silencio».
Su santidad se irradiaba desde antes de los desposorios. Es un «escogido» de Dios; desde el principio recibió la gracia de discernir los mandatos del Señor. No es que haya sido uno de esos seres que no pronunciaban palabra, fue un hombre que cumplió aquel mandato del profeta antiguo: «sean pocas tus palabras». Es decir, su vida sencilla y humilde se entrecruzaban con su silencio integral, que no significa mero mutismo, sino el mantener todo su ser encauzado a cumplir el Plan de Dios. San José, patrono de la vida interior, nos enseña con su propia vida a orar, a amar, a sufrir, a actuar rectamente y a dar gloria a Dios con toda nuestra vida.
Vida virtuosa
Su libre cooperación con la gracia divina hizo posible que su respuesta sea total y eficaz. Dios le dio la gracia especial según su particular vocación y, al mismo tiempo, la misión divina excepcional que Dios le confió requirió de una santidad proporcionada.
Se ha tratado de definir muchas veces las virtudes de San José: «Brillan en el, sobre todo las virtudes de la vida oculta: la virginidad, la humildad, la pobreza, la paciencia, la prudencia, la fidelidad que no puede ser quebrantada por ningún peligro, la sencillez y la fe; la confianza en Dios y la mas perfecta caridad. Guardo con amor y entrega total, el deposito que se le confiara con una fidelidad propia al valor del tesoro que se le deposito en sus manos.»
San José es también modelo incomparable, después de Jesús, de la santificación del trabajo corporal. Por eso la Iglesia ha instituido la fiesta de S. José Obrero, celebrada el 1 de mayo, presentándole como modelo sublime de los trabajadores manuales.
Amor virginal
La concepción del Verbo divino en las entrañas virginales de María se hizo en virtud de una acción milagrosa del Espíritu Santo, sin intervención alguna de San José. Este hecho es narrado por el Evangelio y constituye uno de los dogmas fundamentales de nuestra fe católica: la virginidad perpetua de María. En virtud a ello, San José a recibido diversos títulos: padre nutricio, padre adoptivo, padre legal, padre virginal; pero ninguna en si encierra la plenitud de la misión de San José en la vida de Jesús.
San José ejerció sobre Jesús la función y los derechos que corresponden a un verdadero padre, del mismo modo que ejerció sobre María, virginalmente, las funciones y derechos de verdadero esposo. Ambas funciones constan en el Evangelio. Al encontrar al Niño en el Templo, la Virgen reclama a Jesús:»Hijo, porque has obrado así con nosotros? Mira que tu padre y yo, apenados, te buscábamos». María nombra a San José dándole el título de padre, prueba evidente de que él era llamado así por el propio Jesús, pues miraba en José un reflejo y una representación auténtica de su Padre Celestial.
La relación de esposos que sostuvo San José y Virgen María es ejemplo para todo matrimonio; ellos nos enseñan que el fundamento de la unión conyugal está en la comunión de corazones en el amor divino. Para los esposos, la unión de cuerpos debe ser una expresión de ese amor y por ende un don de Dios. San José y María Santísima, sin embargo, permanecieron vírgenes por razón de su privilegiada misión en relación a Jesús. La virginidad, como donación total a Dios, nunca es una carencia; abre las puertas para comunicar el amor divino en la forma mas pura y sublime. Dios habitaba siempre en aquellos corazones puros y ellos compartían entre sí los frutos del amor que recibían de Dios.
Dolor y Alegría
Desde su unión matrimonial con María, San José supo vivir con esperanza en Dios la alegría-dolor fruto de los sucesos de la vida diaria.
En Belén tuvo que sufrir con la Virgen la carencia de albergue hasta tener que tomar refugio en un establo. Allí nació el Jesús, Hijo de Dios. El atendía a los dos como si fuese el verdadero padre. Cual sería su estado de admiración a la llegada de los pastores, los ángeles y mas tarde los magos de Oriente. Referente a la Presentación de Jesús en el Templo, San Lucas nos dice: «Su padre y su madre estaban admirados de lo que se decía de él».(Lc 2,33).
Después de la visita de los magos de Oriente, Herodes el tirano, lleno de envidia y obsesionado con su poder, quiso matar al niño. San José escuchó el mensaje de Dios transmitido por un ángel: «Levántate, toma contigo al niño y a su madre y huye a Egipto; y estate allí hasta que yo te diga. Porque Herodes va a buscar al niño para matarle» (Mt 2,13). San José obedeció y tomo responsabilidad por la familia que Dios le había confiado.
San José tuvo que vivir unos años con la Virgen y el Niño en el exilio de Egipto.
Esto representaba dificultades muy grandes: la Sagrada familia, siendo extranjera, no hablaba el idioma, no tenían el apoyo de familiares o amigos, serían víctimas de prejuicios, dificultades para encontrar empleo y la consecuente pobreza. San José aceptó todo eso por amor sin exigir nada, siendo modelo ejemplar de esa amorosa obediencia que como hijo debe a su Padre en el cielo.
Lo mas probable es que San José haya muerto antes del comienzo de la vida pública de Jesús ya que no estaba presente en las bodas de Canaá ni se habla mas de él. De estar vivo, San José hubiese estado sin duda al pie de la Cruz con María. La entrega que hace Jesús de su Madre a San Juan da también a entender que ya San José estaba muerto.
Según San Epifanius, San José murió en sus 90 años y el Venerable Beda dice que fue enterrado en el Valle de Josafat.
Patrono de la Iglesia Universal
El Papa Pío IX, atendiendo a las innumerables peticiones que recibió de los fieles católicos del mundo entero, y, sobre todo, al ruego de los obispos reunidos en el concilio Vaticano I, declaró y constituyó a San José Patrono Universal de la Iglesia, el 8 de diciembre de 1870.
¿Que guardián o que patrón va darle Dios a su Iglesia? pues el que fue el protector del Niño Jesús y de María.
Cuando Dios decidió fundar la familia divina en la tierra, eligió a San José para que sea el protector y custodio de su Hijo; para cuando se quiso que esta familia continuase en el mundo, esto es, de fundar, de extender y de conservar la Iglesia, a San José se le encomienda el mismo oficio. Un corazón que es capaz de amar a Dios como a hijo y a la Madre de Dios como a esposa, es capaz de abarcar en su amor y tomar bajo su protección a la Iglesia entera, de la cual Jesús es cabeza y María es Madre.
Devoción a San José
Una de las mas fervientes propagadoras de la devoción a San José fue Santa Teresa de Ávila. En el capítulo sexto de su vida, escribió uno de los relatos mas bellos que se han escrito en honor a este santo:
«Tomé por abogado y protector al glorioso San José, y encomiéndeme mucho a el. Vi claro que así de esta necesidad, como de otras mayores, este padre y señor mío me saco con mas bien de lo que yo le sabia pedir. No me acuerdo hasta ahora haberle suplicado cosa que la haya dejado de hacer. Es cosa tan grande las maravillosas mercedes que me ha hecho Dios por medio de este bienaventurado santo, de los peligros que me ha librado, así de cuerpo como de alma; de este santo tengo experiencia que socorre en todas las necesidades, y es que quiere el Señor darnos a entender que así como le fue sujeto en la tierra, que como tenia nombre de padre, y le podía mandar, así en el cielo hace cuanto le pide. Querría yo persuadir a todos que fuesen devotos de este glorioso santo por la gran experiencia que tengo de los bienes que alcanza de Dios».
Otros santos que también propagaron la devoción a San José fueron San Vicente Ferrer, Santa Brígida, San Bernardino de Siena (que escribió en su honor muy hermosos sermones) y San Francisco de Sales, que predicó muchas veces recomendando la devoción al Santo Custodio.
Fuente: ACI Prensa
Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús
San José, Casto Esposo de la Virgen María
De la misma manera que la Virgen María nació llena de Gracia, y Ella, siendo libre, era la elegida por Dios para ser su Madre, san José era descendiente directo del rey David; como los profetas habían pronosticado que el Mesías sería descendiente del rey, por eso José, san José, era el elegido por Dios para ser él su padre adoptivo, el que da el nombre, el apellido. Los dos, María y José, eran de la misma generación y vivieron en el mismo tiempo; todo estaba calculado, sólo faltaba saber cuál sería su libre proceder y la decisión de su voluntad ante el acontecimiento histórico de la venida de Dios al mundo. ¿Aceptarían ser los padres de Dios? ¿Tendrían fe para creer? La historia nos dice que sí.
P. Jesús
© copyright
Envío diario nº 5.727- Lunes 18-3-24
¿Quieres recibir el Evangelio diario GRATIS? Suscríbete AQUÍ
Lunes 18 de Marzo de 2.024
Tiempo de Cuaresma
Misal virtual de hoy AQUÍ |
Evangelio:
San Juan 8, 1-11
En adelante no peques más
1Se fue Jesús al monte de los Olivos; 2pero, de mañana, volvió otra vez al templo, y todo el pueblo venía a Él, y, sentado, les enseñaba. 3Los escribas y fariseos trajeron a una mujer sorprendida en adulterio y, poniéndola en medio, 4le dijeron: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante delito de adulterio. 5En la Ley nos ordena Moisés apedrear a éstas; tú ¿qué dices? 6Esto lo decían tentándole, para tener de qué acusarle. Jesús, inclinándose, escribía con el dedo en la tierra. 7Como ellos insistieron en preguntarle, se incorporó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado, arrójele la piedra el primero. 8E inclinándose de nuevo, escribía en tierra. 9Ellos que le oyeron fueron saliéndose uno a uno, comenzando por los más ancianos, y quedó Él solo, y la mujer en medio. 10Incorporándose Jesús, le dijo: Mujer, ¿dónde están? ¿Nadie te ha condenado? 11Dijo ella: Nadie, Señor. Jesús dijo: Ni yo te condeno tampoco; vete y no peques más.
Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944)
«Palabra del Señor»
«Gloria a ti Señor Jesús»
Meditación:
En adelante no peques más
Uno de los Evangelios más conocido es este. ¿Por qué será? No, no es porque hace referencia al sexto mandamiento y al noveno, de la Ley de Dios; no, no es por esto. Sino por la misericordia de Dios por los hombres.
Son tan comunes los pecados contra el noveno y el sexto mandamiento, hoy en día, que muchos para cambiar de vida necesitan oír de la voz de Dios: “Tampoco yo te condeno; vete y a partir de ahora no peques más”.
Hay misericordia por parte de Dios y por parte de los hombres, porque ninguno tira la primera piedra, ¿y es que creéis que todos eran pecadores contra estos mandamientos? No, todos no, porque como hoy en día, también antes había personas honradas, que la honra es la guarda de los bienes de uno.
P. Jesús
© copyright
— Consejo nº 1.770 —
.-Nunca dejes la esperanza, porque ella va unida a la fe y a la caridad; si la dejas, lo demás se va con ella.
P. Jesús
© copyright
San Cirilo, Arzobispo de Jerusalén
Fue una bendición que San Cirilo –hombre de apacible y conciliadora disposición- haya vivido en el tiempo de una encarnizada controversia religiosa. De padres cristianos, recibió una excelente educación, sobre todo referente a las Sagradas Escrituras; fue ordenado como sacerdote por el Obispo de Jerusalén, San Maximo, quien le apreciaba tanto sus dotes, que le confió la difícil tarea de instruir a los catecúmenos.
San Cirilo fue consagrado legalmente Obispo por los obispos de su provincia y si Arrio Acacio, que era uno de ellos, esperaba poderlo manejar fácilmente, se equivocó por completo, surgiendo varias disputas principalmente sobre la procedencia y jurisdicción de sus respectivas sedes y asuntos de fe, pues Acacio para entonces estaba imbuido en la herejía arriana. Por confabulación de Acacio y sus partidarios el santo fue desterrado tres veces, por medio de fraudulentos concilios que Acacio convocaba con ayuda de algunos monjes e incluso con el apoyo del emperador. En 381, Cirilo y San Gregorio estuvieron presentes en el gran Concilio de Constantinopla (segundo Concilio Ecuménico). De acuerdo a algunos historiadores, San Cirilo fue fiel defensor de la verdad ortodoxa contra los arrianos, en este Concilio, en el cual se llegó a promulgar el Símbolo de Nicea.
Se cree que el santo falleció a la edad de 70 años, en el 386, habiendo sido Obispo durante 35 años.
Fuente: ACI Prensa
Comentario sobre la biografía del Santo-a, por el P. Jesús
San Cirilo, Arzobispo de Jerusalén
Aunque la fe sea fuerte, la persona tiene que ser amable, apacible y conciliadora; precisamente por tener la fe.
San Cirilo, arzobispo de Jerusalén, vivió grandes tribulaciones que obispos católicos, de su tiempo, equivocados en su fe, le hicieron padecer; pero san Cirilo es santo y esos obispos no. A Dios no se le gana la baza. Pueden dañar a los suyos en vida, pero la eternidad, oh, la eternidad es mandato exclusivo de Dios, el lugar donde la vas a pasar. Medita en esto y no malformes tu fe, porque la fe es una, es la que da la santidad; es la misma en todos los santos, de hoy o de hace dos mil años.
P. Jesús
© copyright
Envío diario nº 5.726- Domingo 17-3-24
¿Quieres recibir el Evangelio diario GRATIS? Suscríbete AQUÍ
Domingo 17 de Marzo de 2.024
Tiempo de Cuaresma
Misal virtual de hoy AQUÍ |
Evangelio:
San Juan 12, 20-33
Guarda tu alma para la Vida por siempre
20Había algunos griegos entre los que habían subido a adorar en la fiesta. 21Estos, pues, se acercaron a Felipe, el de Betsaida de Galilea, y le rogaron, diciendo: Señor, queremos ver a Jesús. 22Felipe fue y se lo dijo a Andrés; Andrés y Felipe vinieron y se lo dijeron a Jesús.
23Jesús les contestó diciendo: Es llegada la hora en que el Hijo del hombre será glorificado. 24En verdad, en verdad os digo que, si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, quedará solo; pero, si muere, llevará mucho fruto.
25El que ama su vida, la pierde; pero el que aborrece su vida en este mundo, la guardará para la vida eterna. 26Si alguno me sirve, que me siga, y donde yo esté, allí estará también mi servidor; si alguno me sirve, mi Padre le honrará. 27Ahora mi alma se siente turbada. ¿Y qué diré? ¿Padre, líbrame de esta hora? ¡Mas para esto he venido yo a esta hora! 28Padre, glorifica tu nombre. Llegó entonces una voz del cielo: <<Le glorifiqué y de nuevo le glorificaré>>.29La muchedumbre que allí estaba y oyó, decía que había tronado; otros decían: Le habló un ángel.
30Jesús respondió y dijo: No por mí se ha dejado oír esta voz, sino por vosotros. 31Ahora es el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será arrojado fuera, 32y yo, si fuere levantado de la tierra, atraeré a todos a mí. 33Esto lo decía indicando de qué muerte había de morir.
Sagrada Biblia. Nacar-Colunga (1.944)
«Palabra del Señor»
«Gloria a ti Señor Jesús»
Meditación:
Guarda tu alma para la Vida por siempre
Tu alma necesita de tu fe, necesita de tu constancia en creer, en tener esperanza y vivir siempre con caridad, dando el bien a todos, por ser tú bueno, por tú querer serlo, y serlo con quien sea, por ser tu natural, la bondad, ¡la caridad!
El mundo no termina en esta tierra, el tiempo continúa, y tienes que saberlo y tenerlo claro, porque muchos viven sólo para esta tierra, que no recuerdan la Tierra Prometida, la que Dios dio y da, y desea que todos vayan a vivir a ella.
Es normal que te afanes por las cosas de este mundo, necesitas vivir, para vivir para siempre, y en este afán cotidiano, por favor, amigo, guarda tu alma para la vida eterna, porque Cristo vino al mundo y murió para que todo el que quiera, tuviera acceso a ella.
P. Jesús
© copyright