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Consulta 20

M. , 55 años , de Colombìa. 5/13/2008

Me siento muy mal por que sufro esclerosis multiple, lupos eritematoso pero el dolor màs intenso que padesco es un dolor en las costillas pues las tengo averiadas y no me dejan tener vida. lo mismo que el colon y gastritis antral crònica.
pero tanbien tengo un dolor en el alma ya que mis hihos y mi esposo me dejaron toda la carga ami tanto econòmica como el oficioñ son indolentes y no se apiadan de mis dolores. quiero que me aconsejen. y que Dios los bendiga.

Respuesta de: María Durán de Bellido. 5/14/2008

Amada y bendita alma de Dios, elegida por tu gran padecer, para que con él y entregándoselo a Dios, Dios, haga maravillas, como es el que seas tú tan buena.

¡Que buena eres, mi niña!

Siento un gran respeto por ti y tu dolor, y por tantas injusticias que recibes. ¿Recuerdas a Jesús? ¡Claro que lo recuerdas! Pues, tú con Él y como Él, sufrís.

Te voy a pedir un sufrimiento más. Sí. Como veo que eres tan buena y que sufres tanto, te quiero pedir; que por la corona de espinas de Cristo, no te quejes nunca más delante de tus hijos y tu esposo. Ellos te ayudan a hacerte Santa. ¿No lo ves? ¿No ves la dicha tan grande que te espera en el Cielo? Oh, bendita mujer de dolores.

Quiero que no te quejes. ¿Sabes por qué? Porque pretendo que recuperes el amor de tu esposo y regrese en tu corazón el sentir la dicha de sentirte amada por él y tus hijos. Y lo conseguirás con sólo no quejarte. Te lo digo en serio. Y no porque tus quejas les amarguen la vida. No; no. Sino porque el dolor de no poder quejarte, ofrecido a Dios, en petición de que restaure tu matrimonio y el amor y respeto que te deben tus hijos, hará que una vez más un milagro de Dios se cumpla en este mundo.

Sonríes. Sé que sonríes. Te quiero tanto; bendita mujer, madre y esposa. Oh amiga mía; quiero que seas feliz; muy feliz. Y lo serás si confías en Dios y le entregas todo, el dolor incluso; el de quejarte.

Trabaja en silencio; haz todas tus cosas en silencio, y el silencio de tu voz, abrirá la puerta de los corazones de tu esposo y tus hijos.

Queda en paz.

 

Sección: Dolor