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Obras de tus manos

 

Obras de tus manos

Maravilloso es el mundo,

sigue siempre su rumbo.

Todo cumple su cometido,

sin retraso, sin olvido.

 

Los astros del cielo,

iluminan de noche y de día,

se precipitan las gotas, cuando hay sequía.

La vegetación crece y da alimento,

todas las criaturas reciben su sustento.

 

La Belleza suprema

se puede encontrar en la naturaleza;

en sus trazos se percibe una divinidad creadora.

Cada matiz revela perfección y ciencia.

 

En las pinceladas del artista se ve su reflejo,

y en la creación del mundo se descubre a Dios.

 Sabiduría oculta se halla en todo, que desvela

la sublime inteligencia del Creador del mundo.

 

La ciencia todavía no da alcance

a responder a tanto, aún su avance,

porque, Dios, tu intelecto y magnificencia,

 superan los límites de nuestra inteligencia.

 

Tras cada suceso,

tras cada objeto,

tras cada ser vivo,

 se te halla a Ti, Dios.

 

Cada tallo, cada flor hermosa,

es una muestra de tu cariño y esplendor,

Pero toda tu grandeza se demuestra en extremo,

 en el ser espiritual,

 en el alma inmortal, que todos poseemos.

 

De la nada creaste todo,

el espacio y el tiempo,

la tierra firme,

el mar inmenso.

 

Después de tantos milenios,

el corazón del mundo aún palpita,

la creación entera respira,

sigue la vida…

porque todo lo has bien dispuesto.

 

El Todopoderoso, ¡el mejor artista!,

que formó del polvo al hombre,

nuestra vida y todo lo que nos rodea,

con tanta perfección y esplendor.

 

Dios mío, ¡querido Creador!

excelso talento el tuyo,

que en seis días creaste

 todo el universo.

 

Sin duda, benditas,

nuestras almas,

por ser bellas obras,

de tus manos.

 

Alba Bellido Durán
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