Consulta 6

 Hermana, es la segunda vez, y sospecho que por la cantidad de consultas que debe recibir, le será muy difícil acordarse de mi nombre… pero de lo que si estoy segura es de que me responderá con el mismo cariño que sentí en la respuesta de la primera consulta que le hice, dicho sea de paso le escribo para agradecerle.
Soy una joven de 16 Años, estoy en mi último año de escuela secundaria, ya tengo decidida que carrera estudiar, soy catequista de niños en mi Parroquia. Soy católica Cristiana desde el día en que me bautizaron, fue un regalo de Dios pues me acuerdo de aquel día ya que recibí el bautizo a mis 7 años de edad.
El motivo de mi consulta es el siguiente:
Yo estoy enamorada de un Catequista igual que yo, desde hace un par de años, pero el me lleva 15 años más… si es bastante la diferencia… y un agravante fue que hace hace un año y un mes tuvimos relaciones sexuales, con el consentimiento de los dos… fue algo que nos hizo sentir muy mal, nos confesamos y nos pedimos disculpas el uno al otro para luego pedir perdón a Dios… hemos buscado ayuda por muchos lugares, con sacerdotes y amigos en Cristo…
Luego del acto, el Amor que nos teníamos no se rompió ni lo más mínimo, y es algo q me hace pensar mas a fondo, pues escuchando comentarios de amigas que tuvieron relaciones sexuales con sus enamorados, quedaron llenas de asco y agredidas psicológicamente… cosa que no pasó conmigo… claro que me sentí muy dolida por haber defraudado a mi Señor… sin embargo mi enamorado en vez de hacerme daño luego del acto, me trató con mucho tino… y ternura. Mis papás a los días se enteraron de nuestra relación de enamorados pero fui yo quien les contó sobre el acto, eran mis padres, yo necesitaba ayuda y debía recurrir a ellos, de modo que no esperé un buena reacción de parte de ellos, sino todo lo contrario. Y fue así, mi enamorado vino a mi casa, con la intención de hablar con mis padres, y mi papá lo botó de la casa, pidiéndole por favor que se alejara de mí, luego de unos días me comuniqué con el, para decirle que yo consentía el que nos alejáramos. Y gracias a Dios el respetó mi decisión. Cada uno buscó ayuda espiritual, psicológica y emocional en distintas partes… estuvimos un año separados e incomunicados… pero hermana lo que yo sentía por él no cambiaba, sino que en el silencio de mi corazón seguía creciendo aquel Amor, le pedía cada día al Señor por él , y porque nos muestre su voluntad… Hace unos tres meses , nos comunicamos por el correo, a los dos nos causó alegría saber el uno del otro…
Y con precaución nos contamos todo lo que habíamos vivido durante la separación, el había estado solo también, buscando luz en la vida de Servicio a la Iglesia, como lo hacía desde que lo conocí, me llenó de paz. También dejamos ver lo que sentíamos. Yo le pedí, que rezáramos mucho para no volver a caer, pues dejaríamos de vernos a escondidas, y sólo nos comunicaríamos por correo o por teléfono, el aceptó y vivimos tranquilos, tenemos metas personales como también en común. Hermana yo deseo lo mejor para él, y le digo al Señor en oración, que si es su voluntad sacar este sentimiento de mi corazón pues q yo estaría dispuesta. Aunque cada vez, él me dice que me Ama, y que está dispuesto a esperar todo el tiempo necesario. Le he repetido muchas veces que lo que más quiero es no volver a mentir en casa… y gracias a Dios que no me exige el que nos veamos… y que se queda tranquilo trabajando, estudiando y leyendo mis correos que le quieren dar aliento para seguir sirviendo al Señor en su Trabajo pastoral. Hermana, siento que todo esto sea extenso… pero me es necesario darle terreno para sus consejos que me harán muy bien… ¿Podemos volver a ser castos? ¿Hermana usted cree que esta relación es bien vista a los ojos del Señor? ¿Qué debo hacer para cuando tenga la mayoría de edad les cuente a mis padres sobre mi decisión de estar de enamorados con él? ¿Debo contárselos ahora aunque no vea a mi enamorado? ¿Debo cortar comunicación con mi enamorado O NO?

Respuesta de: María Durán de Bellido. 4/15/2009

Alma sensible.

Sabes bien que no obrasteis bien, sabes bien que siendo menor de edad y por respeto a tus padres, no debes hacerles daño, dañándote a ti misma yendo contra la pureza, sino darles tus obras de amor. Te remito a tu madre para que ella sabiamente te aconseje en este tema. Tienes, por lo que cuentas, unos padres a los que puedes hablarles, ya que les hablaste de lo sucedió, entonces, no desperdicies esa maravilla, porque tener unos padres con los que hablar de cualquier tema es una dicha, aunque a veces no digan lo que queremos oír sino lo mejor para nosotros.

Y sí que una persona que ha perdido la pureza puede recuperarla.

No hagas cosas que te dañan y dañan a las personas que amas. Eres templo del Espíritu Santo.

Queda en paz.

Sección: Hijos