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Consulta 2

D. , 28 años , de Colombia. 7/22/2008

Buen día:

Aprovecho este medio para expresarles la situacion por la cual estoy pasando. Hace 4 años me separe del padre de mi hija nunca nos casamos y durante ese tiempo intentamos limar asperesas y todo lo que nos desencanto pero lastimosamente tengo que manifestarlo entendi que no lo ame lo suficiente y de paso hay muchas heridas en corazon que no he sanado del todo, es decir no las he superado. Ayer con mi hija que tiene 8 años es muy rebelde y desafortunadamente para mi se parece en su apariencia, comportamiento y hasta mentalidad al padre, y en mis momentos de ira se lo he manifestado. Gracias a un amigo comprendi que quien mas necesita ayuda soy yo por que estoy fallando en mi rol de madre y no la estoy aceptando como ese ser único, especial creado por Dios. Por favor ayudenme que necesito iniciar terapias pero no cuento con recursos para pagar un psicologo. Agradezco que la respuesta que me brindan no se publique y sea enviada directamente a mi correo. Gracias elevadas a mil. Daisy

Respuesta de: María Durán de Bellido. 12/8/2008

Alma de Dios y para Dios. En esta maravillosa sección, no juzgamos a nadie y amamos a todos y nos ayudamos con nuestras experiencias, así que permíteme, querida amiga a que comparta tu experiencia y mi experiencia con otras almas que quizás tus palabras y las mías puedan ser de auxilio.

Gracias.

Primero hay que saber, luego comprender, después aceptar y así podremos amar más y mejor.

Los hijos deberían nacer de la consecuencia de la unión de dos esposos que unidos en el amor y para siempre decidieran casarse y recibir así, el sacramento del matrimonio, y de tal unión libre y con voluntad de ser perpetua, en su unión carnal del amor romántico, nacieran los hijos que culminaran el amor de esposos.

Así es como yo, y todos nos gustaría haber nacido. Del amor maravilloso y fantástico de dos personas que amándose tanto y amando tanto a Dios hicieran lo natural, darse y recibir amor conyugal.

Tu hija no nació en tales circunstancias, y es una tristeza y ella no tiene la culpa de ser hija vuestra y de la ignorancia de las acciones a que os expusisteis por ese amor terrenal y momentáneo que sentisteis.

Yo creo, que podrías perdonarlo, a él, a su padre, al padre de tu hija, yo creo que no hallarás a otro, a ninguno que sea perfecto, y si no vives en gracia de Dios, tampoco tendrás jamás el amor verdadero. Esa es la verdad de lo que nos ocurre a las personas; que somos incapaces de recibir y dar amor, si no estamos unidas a Dios: al Amor.

No es culpa de nadie esta realidad. Quiero decir, que nadie puede evitarla; está ahí; es así: Venimos al mundo para encontrar a Dios y vivir con Dios y servir a Dios y darlo todo por Dios.

Si no hacemos esto: Nada funciona.

Tu amigo tiene razón, eres tú la que necesita ayuda; porque si tu vives sin Dios, no sabrás amar, no podrás amar y no amarás a tu propia hija, que por ser como es te recuerda a tu pecado; que pecar es ir contra Dios; y Dios no quiere que vayamos teniendo hijos de aquí y de allá y de más allá. Dios quiere que LIBREMENTE, dos personas que están enamoradas se casen y sea para siempre, y que de este amor y con este amor nazcan los hijos.

Pero para esto, primero uno: Tú misma, tienes que darte cuenta de que si tienes vida es para que con ella mires al futuro, más allá de tu muerte y puedas penetrar en la Gloria de Dios, que tiene reservadas a las personas de corazón valiente y que se dejan amar por Dios.
¿Dejas que Dios te ame?

¿Sientes en ti el amor de Dios?

Entonces, si tu respuesta no es sí, entonces tú vives sin Dios, y por lo cual, No tienes amor. Porque el único que ama y ama de verdad es Dios.

Debes acudir a la Iglesia Católica. Es gratis. Debes ir al Sagrario, y allí, ante Jesús, pedirle que te ame. Decirle que deseas ser amada por Él: el amor de los amores.

Y Dios pide que confieses tus pecados y faltas. Y hacía el confesionario debes ir y allí, contar a Dios mismo, en la persona del sacerdote; todos tus pecados y faltas y todas las necesidades que tengas, y él, el sacerdote, que además de representar a Dios en que al darte la absolución, recibes de Dios el perdón, si cumples con la penitencia impuesta; tiene también el sacerdote estudios de psicología, y gratuitamente de ayudará a que la paz de Dios sea parte principal en tu vida.

Acude a la Santa Madre Iglesia Católica, porque desde Ella y con Ella, Dios te Ama, te llama y quiere darte Su Amor. El amor de todo un Dios que se hizo hombre y su nombre es Jesús de Nazaret.

Queda en paz.

 

Sección: Madres solteras