Saltar al contenido

Consulta 34

M. , 28 años , de MEXICO. 9/13/2008

TENGO 3 HIJOS, SOY DIVORCIADA, PERO HACE 7 MESES VOLVI CON MI ESPOSO. CASADA POR LA IGLESIA. NOS CASAMOS, PERO AL INSTANTE SE ACABO TODO ENTRE NOSOTROS, MUCHOS PROBLEMAS ECONOMICOS, Y EL SEXO SE ACABO. ERAN CONTADAS LAS OCASIONES. VIVI COSAS MUY FEAS, Y SE QUE YO TENGO CULPA DE MUCHAS Y TENGO DEFECTOS. MUCHOS. PERO HACE UN POCO MAS DE DOS AÑOS QUE MI MARIDO SE FUE A TRABAJAR CON LA PROMESA DE REGRESAR POR NOSOTROS, Y NO LO HIZO, NOS DEJO. VOLVIO 6 MESES DESPUES, Y LO ESPERE UN AÑO, INSISTIENDO EN RECONSTRUIR NUESTRA FAMILIA, FUE UNA LUCHA MUY CANSADA EMOCIONALEMNTE, PUES PROMETIA MUCHAS COSAS Y NADA. HASTA QUE AL AÑO LE DI EL PLAZO,Y NO LO CUMPLIO, ASI QUE NOS DIVORCIAMOS.AL POCO TIEMPO CONOCI A UNA PERSONA Y ERA FELIZ, DEJO DE IMPORTARME TODO. LO QUIZE MUCHO.Y CUANDO MI MARIDO SE ENTERO ME ROGO Y SUPLICO, QUE REGRESARA CON EL ME VI EN UNA ENCRUCIJADA, NO VEIA APOYO DE MI MAMA DE ESTAR CON LA OTRA PERSONA, Y ESTABAN MIS HIJOS, QUE IBAN PARA 2 AÑOS SIN VIVIR CON SU PAPA, Y PENSE EN ELLOS.. YO NO SE X QUE SIGO CON MI ESPOSO.. X QUE?SI ME PESO DEJAR A LA OTRA PERSONA!X QUE ME SIENTO TAN INSEGURA Y POCO VALIENTE DE DEJARLO?LO AMO?X QUE QUIZO VOLVER CONMIGO SI YO LE ROGUE TANTO Y NUNCA QUIZO.. Y SIENTO QUE FUE SU HOMBRIA LA QUE SE VIO AFECTADA NADA MAS. 7 MESES DE RECONCIALICION Y NO VIVO AUN CON EL.QUIERO VER A LA OTRA PERSONA.

Respuesta de: María Durán de Bellido. 9/17/2008

Alma arrepentida de tantas cosas. Ven, deja que te abrace y te cuente como a una querida hija, muchas cosas de la vida, que vas a comprender en seguida con la Gracia de Dios, que derrama a los que ama. O sea, a todos.

Cuantas gracias se pierden. ¿Has pensado en eso, querida alma angustiada? ¿Has pensado en Dios, el que nunca falla?

Es difícil a veces disfrutar del placer sexual cuando hay muchos y grandes problemas económicos y poca fe y confianza en Dios. Pero Dios no abandona, y después de la prueba todo se soluciona y regresa la pasión, la satisfacción física y el amor que debe acompañar a las relaciones de los esposo, y no solo las relaciones físicas sino toda comunicación de amor entre los esposos que ante Dios se dieron palabra y promesa sagrada de que su amor sería para siempre.

Dices que quieres ver a la otra persona. ¿Será que así vives momentos de evasión de la vida real que tienes? ¿Será más evasión de la realidad que amor verdadero? Posiblemente sea eso, bondadosa alma para Dios. Podría ser que necesitaras olvidarte para disfrutar de la vida.

Y aquí está el error, mi querida hermana en Cristo, Dios de Amor. Sí, el error de que la vida sea para disfrutarla. No. No está la vida para disfrutarla sino que está para ser felices; que esto es algo muy distinto. Uno puede disfrutar de una comida pero jamás podrá ser conscientemente feliz de comer esta comida sabiendo que otros realmente mueren de hambre. Literalmente mueren de hambre. ¿Has visto la diferencia entre felicidad y disfrute? Sí, se que la has visto. Bendita seas alma fuerte y buena.

Tienes rencor por tu esposo, te rabia que no regresara cuando se lo pedía y que por eso te llevara a los brazos de un amante. Tú eres buena, oh preciosa alma que tanto Dios ama. Llora, sí, llora, porque llorando saciarás tu corazón que está seco por la soledad y el desprecio que recibió de tu esposo. Tú amas a tu esposo, sí, lo amas, y te duele.

Hay un remedio para todo. Y el remedio para ti, es que decidas aceptar vivir una temporada en esta precariedad económica y ser feliz aún con ella. Con la pobreza.

Unidos, podréis salir de ella, cosa que separados jamás haréis. Continuarás siendo pobre y amante de un hombre que te hace disfrutar pero que no te da la felicidad.

Llora y acepta que Dios te ama y quiere que vayas a verlo a la Iglesia. Quiere que compartas con Él tus lágrimas. Y, no necesitas dinero para ir a confesarte y para ir a comulgar y poder así unirte con Dios vivo y verdaderamente presente en la Sagrada Hostia consagrada. ¿Verdad que necesitas de Dios? Sí.

Y también necesitas de una buena Madre, sí, necesitas de María, la Madre de Dios, que hace rato que oigo como te llama en tu corazón casi destrozado, para cubrirlo con su manto sagrado y llenarte de besos para que puedas descansar en paz. La paz que siempre da Dios junto con Su amor.

Descansa en Sus brazos, en los brazos de Dios, de Jesucristo, que te rodean y te bendicen cuando ven que estás dispuesta a ser feliz y no a sólo disfrutar de la vida.

Vive.

Queda en paz.


Sección: Matrimonio