– PRIMERA PARTE LA PROFESIÓN DE LA FE Artículo 3 LA SAGRADA ESCRITURA III. El Espíritu Santo, intérprete de la Escritura 3. El sentido anagógico. Podemos ver realidades y acontecimientos en su significación eterna, que nos conduce (en griego: «anagoge») hacia nuestra Patria. Así, la Iglesia en la tierra es signo de la Jerusalén celeste (cf. Ap 21,1-22,5). |
Meditación:
III. El Espíritu Santo, intérprete de la Escritura La voluntad de Dios es para poblar el Cielo Eterno, Su Reino, de los que viviendo en el mundo, lo aman sobre todas las cosas y personas, y deciden, por fe y voluntad, ir a la Jerusalén Celestial. P. Jesús © copyright |