 | Título: Roma, dulce hogar: nuestro regreso al catolicismo Autor: Scott Hahn; Kimberly Hahn
«La lectura de “Roma dulce hogar” te hará mucho bien, por lo que te lo recomiendo al 100%, porque, aparte de que te hará pasar un buen rato, te ayudará en lo espiritual, a amar más a la Iglesia de Cristo, ¡de Dios!» Victoria Bellido Durán |
| Sinopsis del libro Un matrimonio norteamericano ofrece el testimonio cálido, sincero y realista de su conversión al catolicismo. Es una peregrinación espiritual que transforma toda su vida; un camino de búsqueda de la verdad y aceptación de la voluntad divina, que culmina en la inmensa alegría de la vuelta a casa: a la Iglesia católica. |
Opinión del libro «Roma, dulce hogar: nuestro regreso al catolicismo»
Es duro, muy duro, descubrir que lo que uno ha estado haciendo por largo tiempo, por años, pensando que era lo bueno, lo correcto, lo mejor, no lo es, y que en realidad, estaba viviendo en el error. Es difícil cambiar de religión, cuando uno ha estado seguro de que era la verdadera, la de Cristo, Dios hecho hombre, tachando de falsa, a la que al fin, descubre que realmente es la única y verdadera Iglesia que fundó Dios. ¿De dónde se sacan las fuerzas y la valentía para cambiar de religión, cuando tus padres, familiares y todos tus amigos, piensan como pensabas tú? “Roma dulce hogar” es una entrañable historia, la historia de cómo Scott Hahn, abre los ojos a la verdad, ya siendo un importante teólogo y pastor presbiteriano. A pesar de que su obstinada mujer, Kimberly, se opone a ello, Scott no puede dar la espalda a Dios, a la Verdad; y renunciando a su trabajo, estatus y amistades, se une a la Iglesia Católica, Apostólica y Romana, donde al cabo de unos años, tras muchas Misas, rosarios y oraciones, sus hijos y, finalmente, su amada esposa Kimberly, abrazan la fe Católica. El libro está explicado desde el punto de vista de ambos esposos, donde se recrean escenas y diálogos, desde su juventud. Es una lectura ágil, interesante, donde el lector puede pasar de reír a llorar, pero con un buen final, que a todos nos llena de esperanza, pues Scott y Kimberly, con su vida, nos demuestran que para Dios, nada es imposible. Es un libro que engancha desde el principio, casi podría decirse, una novela autobiográfica, excelente para regalar a cualquiera: a católicos, a personas que no conocen la fe católica, o incluso, a los que se han apartado de ella. La lectura de “Roma dulce hogar” te hará mucho bien, por lo que te lo recomiendo al 100%, porque, aparte de que te hará pasar un buen rato, te ayudará en lo espiritual, a amar más a la Iglesia de Cristo, ¡de Dios! Victoria Bellido Durán |
