Consulta 46

Respuesta de: María Durán de Bellido. 

Estimada amiga C.:
Gracias por escribirme y por la confianza de tu consulta. Mi opinión es:
¿Podría ser que no estuvieras segura de merecer el Amor con que Dios te Ama?… Dios te Ama, te quiere porque es tu Padre de verdad, porque él te engendró el alma, lo que eres y por lo que vive tu cuerpo. ¿Te ves indigna del Amor con que Dios te Ama?… Sé que tú lo Amas, ¡y muchísimo!, pero, ¿te crees digna de recibir su Amor?… El amor de Dios no nos lo da por si nos lo merecemos o no, sino que Dios nos Ama porque es NUESTRO PADRE verdadero, sencillamente es la Verdad. Tenemos unos padres que nos han dado el físico, pero son realmente, digamos, unos padres adoptivos del alma, que es nuestra esencia de vida y en ella depositamos toda la experiencia y las obras que hacemos con nuestro cuerpo que nos permite vivir en el hábitat del planeta tierra. Acepta la realidad de que tu Padre verdadero es Dios, y que tu padre adoptivo y tu madre adoptiva, que crearon tu cuerpo y te dieron vestido, alimento, techo, ellos, son TUS HERMANOS EN CRISTO, que debes de tenerles paciencia, misericordia, bondad, amor, pero la potencia de tu corazón debe, tiene que ser en exclusiva para Dios, y siendo de Dios, de tu Padre Dios, de tu Hermano Dios, del Amor que es Dios Espíritu Santo, intentes ayudarlos, pero que sean sus palabras eso, palabras de un hermano, de un compañero de viaje en este planeta tierra y que no te acaparen la mente y te depriman sus comentarios negativos hacia ti, porque tu Padre verdadero te Ama y tiene previsto un destino fantástico para ti, ¡el de la Gracia santificante!, allí donde lo que haces es todo bien y bondad, es todo alegría y voluntad recompensada por y con milagros de Su Amor, Amor de Dios que no falla. ¡Quita la mirada puesta en tus padres terrenales y ponla en el Corazón de este Dios, ¡tu verdadero padre, que no te falla!, solo que tú no le das la importancia que tiene.
La crisis mundial del trabajo, pero más de los valores, hace que muchos estén mal, pero es que lo normal en la persona es eso: “estar mal” y esforzarse en prosperar. La persona tiene que prosperar siempre, esa es su tendencia natural, por eso “siempre estará mal”, porque cama tienen y pan tienen, y si dicen que están mal es que quieren lo que ven en las películas, y tampoco hace falta todo esto para cada persona. Antes la gente vivía en familia, y siendo más que traían en dinero a casa, era más normal que pudieran, entre todos, tener lo que tenían, pero es que ahora se quiere para cada uno lo que antes tenían juntos la familia. Sí que hubieron tiempos que los créditos e hipotecas vendieron “el sueño americano” a todos, pero ahora no se puede devolver en dinero lo que se vivió de prestado; fue una temporada, en años, pero no es lo real. Sacaron a la juventud de casa, y ahora, muchos están solos, sin familia y con unos gastos que para poder afrontarlos lo normal sería que toda una familia, y numerosa, (más de 3 hijos), participaran con su trabajo de los gastos. No hay trabajo, porque hay crisis, crisis que ya pasará, pero que mientras no pase habrá que aceptar las consecuencias de esta precariedad económica, y aceptarla es cambiar de vida, olvidarse del antes que nos llevó a este después, y ser ahorradores, austeros, muy trabajadores y pacientes en subir de nuevo de nivel, y mientras tanto, disfrutar de la fuerza de voluntad, disfrutar de los sueños, y soñarlos y luchar por hacerlos realidad, con el esfuerzo diario, y sobre todo con la ayuda de Dios, pedida en la oración. Si tardas en recibir la ayuda de Dios, que siempre te la da, es que Dios lo permite para que te perfecciones. ¡No son necesarias tantas cosas!, ¡el pasado quedó atrás para todos!, y tus padres tendrían que comprenderlo, y si no lo comprenden es porque no quieren aceptarlo y están luchando con molinos de viento, como hacía el Quijote. Hay que tener fe, y la fe, jamás está reñida con la realidad, es más, es su aliada, porque sabiendo la realidad se puede rezar a Dios Padre, que tanto nos ama, para que la cambie, para que nos ayude a cambiarla, guiándonos a través de Dios Espíritu Santo y con el Amor real de los abrazos que recibimos al Comulgar, de Dios mismo en la Sagrada Eucaristía.
¿Cómo puedes admirar a gente que no Ama a Dios?… puedes respetarlos, pero la admiración, ¡mucho ojo!, porque lleva a copiarlos, a imitarlos, y vas a perder la fe. Debes valorar esas cualidades personales, pero que sin Dios, van a decepcionarte esas personas, eso es así, porque la naturaleza del ser humano, sin los sacramentos, sin el sostén de la Gracia santificante, debilitan el ser un día van a decepcionarte y no se arrepentirán y lo harán adrede, porque quien no ama a Dios es el dios de si mismo, y ¿cómo quieres relacionarte bien con uno que va de dios?. Ya quien vive la fa y vive en Gracia de Dios, le cuesta no caer en la mala tentación, que siempre somos tentados, todos, ya sea por la carne, por el demonio o por el mundo. Esas relaciones te van a decepcionar si pones admiración en esas personas que no tienen a Dios y por lo cual están abandonadas de la Gracia, de Dios, que nos mantiene, porque sí somos algo buenos y hacemos algo bien, siempre es por Dios que vive en nosotros, sino, eso que puede atraerte de los ateos, es simplemente que se cogen la vida con esa alegría del niño que no ve, que no sabe de qué va la vida, pero ¡se enfada tantas veces!, sobre todo cuando cae, cuando le hacen daño, cuando las cosas no le salen como quiere y le falta el líquido que le produce esta alegría, este desprendimiento de la vida, pero ocurre que lo que pasa, es que no se enteran de la mitad de las cosas. Las cosas son como son, pero no verlas eso no quiere decir que no lo sean. Quizás estando abatida esa alegría del niño que no sabe, (lo que les ocurre a tus amigos, que no saben que hay un Dios, un Cielo y un Infierno), te pueden aliviar de los pesares, pero es la falsa ilusión momentánea, luego verás realmente como son y llorarás más.
A estas personas que quieres y son ateas, ¡quiérelas!, y con tu ejemplo enséñales que primero es Dios en nuestras vidas, que sin Dios, eso que ahora admiras de ellas, se perderá, pero que si se unen a Dios, Dios se lo guardará y les aumentará. Sí, ya sé que hay católicos que son malos, ¡es lo que hay!, y de hecho no son católicos, sólo llevan el nombre, nada más, porque tal y como dijo Jesús, Dios: “por sus frutos los conoceréis”. Es bueno que quieras a estas personas, y también es bueno que quieras a los malos católicos y a los buenos católicos, ¡que hay!, y tú debes ser, continuar siendo uno de esos. ¡Ánimo!, en Dios está la verdad, y la Iglesia Católica, pase lo que pase, es la única Iglesia fundada por Dios Nuestro Señor Jesucristo, el Mesías, ¡el Rey!
No existe en la vida la felicidad plena, existe el trabajo duro, la labor ardua para ayudar a Dios a salvarnos. Nadie sabe cuando y como va a morir, hay que vivir pensando en la verdadera vida, que se vivirá después de esta, en la que dejaremos el cuerpo carnal, tal y como es ahora, y nos iremos con lo que somos, alma, y otro día, volverá nuestro cuerpo, luego glorioso, para unirse a la dicha del siempre en el Cielo Eterno.
Amiga mía, alma de Dios, alégrate de estar viva de tener fe y ocúpate de algo digno, de servir en algo bueno a Dios, por Caridad, con Caridad. Y mientras no te salga más trabajo, pasea, disfruta de los rayos del sol, que son gratis y para todos. Hoy estas triste, pero ¡ya pasará!, es que te han dado “golpes”, que no merecías, pero, acéptalos y resiste, porque hay quien “pega”, porque no tiene nada más que dar”. ¡Lástima que no tengas una buena familia!, porque el amor de los padres, de la familia, es esencial. Y, también te diré, que vendrá el trabajo, para ti, para todos, porque los ricos querrán tener más y pondrán puestos de trabajo para que trabajando la gente para ellos, ellos tengan más, así que su egoísmo ayuda también, porque todo lo utiliza Dios para bien. Todo pasará y vendrán tiempos de Providencia, porque Dios utiliza de todos los talentos que les da, y aunque sean personas sin amor a Dios, Dios los creó con toda la potencia de Su Amor, y por eso cada quien tiene talentos, lo que ocurre, lo que pasa que pocos los usan con Caridad, pero los usan, y aunque sean por y para sus propios fines, ayudan al mundo, porque incluso el mundo se beneficia del afán de riqueza de tantos. ¡La vida irá cambiando!, ¡ya lo verás!, volverá el dinero y muchos tendrán trabajo.
En la vida no todo es el dinero y la belleza que se consigue con el dinero, sino que hay los goces del alma, ¡que son gratis para todos! La lucha por ser mejor cada día y ofrecerle a la Virgen María ese éxito que Dios nos entrega y nos da, el que permite nuestra fidelidad y los esfuerzos de mantenernos firmes en las obras de la fe, porque la fe hay, pero obras de fe, no tantas. ¡Mal, muy mal! Por eso necesitamos todos de Dios de vivir la Eucaristía, de amar a todos, buenos y malos, ateos o creyentes, porque todos somos realmente hijos del Buen Dios, lo que ocurre es que algunos no se han enterado. Tú lo sabes, ¡qué no se te olvide!, es más, tienes el deber de hacerlo saber, con tus obras y palabras, al mundo entero. ¡Propaga la fe!.
Conclusión: Peor sería haber pasado por una guerra, ¿verdad?, y ha habido tiempos en la vida que eso pasaron personas como tú, como yo, como todos, que tuvieron que levantar un país, una económica, después de una guerra, después de ver morir a gente que querían. Es mejor la crisis, ¿ves?… La vida jamás ha sido el Cielo, sino que es un lugar de prueba. Estas siendo probada, todos estamos siendo probados, ¿a ver que marca vas a dar?, esa es la única realidad que debe preocuparte mi querida amiga?, ¿qué le vas a entregar tú a Dios, cuando te halles ante su amada presencia, en la que verás, de pleno, de llenó, cuánto te Ama, cuán grande ha sido y es Su Amor?
Espero que mis palabras te hayan sido de utilidad, mi querida amiga. ¡Un abrazo!, y, ¡ánimo!
Queda en paz.
Dios te bendiga y la Virgen María te guarde.
Con cariño
Maria

Sección: Sociedad