Te adoro
Profunda afirmación, gran declaración, salida del corazón. Una firme y bella oración.
Solamente para Ti puede ser. Solamente a Ti se puede dirigir, para demostrarte nuestro querer, para tu glorificar y servir.
Te adoro sí, sólo a Ti. Te adoro sin descanso ni fin.
Te adoro ¡Oh Dios mío! Te adoro Padre querido.
Mi alma se alegra, al proclamarlo. De paz se llena al exclamarlo.
Te adoro Rey del universo. Te adoro, y no dejaré de hacerlo.
Que el mundo se una a mi adoración, que lo proclamen los ángeles con gran convicción.
Que resuene por todo el universo. Que lo oigan todas las naciones. Sólo Tú, eres Dios Todopoderoso, Sólo a Ti, te adoro con gozo.
Creador del mundo, Padre amoroso. Rey majestuoso ¡Dios Todopoderoso!
Adorémoste ahora, adorémoste mañana. Adorémoste cada día con amor y alegría.
Dios amado, gloríate en nosotros. gózate en nuestro amor oh, mi Señor.
Sólo a Ti, sí, sólo a Ti diré: ¡Te adoro! Dios mío.
Alba Bellido Durán |