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68 Biblia y meditación

La Biblia
El encuentro de Jacob con Esaú
Génesis 33, 1-11

Capítulo 33

1 Jacob alzó los ojos, y al ver que Esaú venía acompañado de cuatrocientos hombres, repartió a los niños entre Lía, Raquel y las dos esclavas.
2 Puso al frente a las esclavas con sus niños, luego a Lía y a sus hijos, y por último a Raquel y a José.
3 Después se adelantó él personalmente, y antes de enfrentarse con su hermano, se postró en tierra siete veces.
4 Pero Esaú corrió a su encuentro, lo estrechó entre sus brazos, y lo besó llorando.
5 Luego dirigió una mirada a su alrededor, y al ver a las mujeres y a los niños, preguntó: «¿Quiénes son estos que están contigo?». «Son los hijos que Dios ha concedido a tu servidor», respondió Jacob.
6 Entonces se le acercaron las esclavas con sus hijos y se postraron ante él.
7 Inmediatamente vino Lía con sus hijos, y también se postraron. Por último se adelantaron José y Raquel, e hicieron lo mismo.
8 Esaú preguntó: «¿Qué intentabas hacer con todo ese ganado que me salió al paso?». «Lograr que mi señor me diera la bienvenida», respondió Jacob.
9 Pero Esaú añadió: «Ya tengo bastante, querido hermano. Quédate con lo que es tuyo».
10 «No, le dijo Jacob; si quieres hacerme un favor, acepta el regalo que te ofrezco, porque ver tu rostro ha sido lo mismo que ver el rostro de Dios, ya que me has recibido tan afectuosamente.
11 Toma el obsequio que te ha sido presentado, porque Dios me ha favorecido y yo tengo todo lo necesario». Y ante tanta insistencia, Esaú aceptó.

Meditación:

El encuentro de Jacob con Esaú

Jacob y Esaú, los hijos de Isaac y Rebeca; con los años, Dios hace de ellos verdaderos hermanos en su fe, en la fe de sus padres, por el Dios Único que favorece, aún en las desgracias, aún con las debilidades humanas, y teniendo siempre en cuenta el amor en la fe. ¿Amas a Dios, hijo-a? Si lo amas, Dios te protegerá y te unirá a los de tu casa. Deja pasar el tiempo y sé humilde, y da de lo que de Dios recibes y vas a recibir. Y acepta lo que otros te entregan de parte misma de Dios. Sé fiel a Dios, y Dios te mostrará su bendición con la reconciliación de la familia, pero sé bueno, y da de lo que Dios te da, y recibe de lo que otros han recibido de Dios. Porque todo es para mayor gloria del que Es, Fue y Será, por los siglos de los siglos. Amén.

Aprende de la historia, haz tu historia, dirigido de la mano de Dios. Reza siempre, únete a Dios como hizo Jacob, y Dios hablará contigo a través de su divina Providencia.

La fe, regalo de Dios, es.

P. Jesús

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