| e. , 34 años , de mexico. 6/28/2008 mi matrimonio esta en crisis mi esposo me fue infiel descubri todo las cosas que esa mujer me dijo me hicieron tanto daño que no puedo tener confianza en eldice que ya cambio pero creo que esta peor por que no me apoya en nada se la pasa en la calle como que se siente mas feliz fuera yo pongo todo de mi parte para que este agusto pero siento que esta ausente como que si no estuviera aqui no duerme anda desesperado y la verdad eso me pone mal porque los mas dañados son mis hijos estoy vatayando mucho con ellos he pensado mejor en la separacion porque no les dedica nada de tiempo a ellos yo estoy cargando con todos los gastos de la casa soy padre y madre y eso ya me esta desgastando ya que meda coraje con el que solamente piensa en sus amigos y su diversion digame que puedo hacer dios la bendiga. |
Respuesta de: María Durán de Bellido. 9/20/2008 Alma apesadumbrada, y con razón, porque la vida está siendo muy triste para ti en estos momentos. Pero tienes que seguir luchando tienes que seguir amando a Dios. Si tu esposo te quita la paz, díselo, dile, con paz: “Tú me quitas la paz y me matas con todo lo que me lastimas. Necesito que cambies de conducta, necesito que seamos de nuevo dos en una misma dirección, pero si tú te vas de casa, si tú no me apoyas ni me ayudas, si tú pones tanta y tanta amargura en mi corazón tendremos que pensar en una más triste solución que la que estamos viviendo hoy. Debes serme fiel y quererme y demostrarme lo que eres: mi esposo, debes hacerlo porque lo prometiste ante Dios y porque eres mi esposo y en nombre del amor que nos tuvimos necesito oírtelo decir, por favor”. Si no te ves capaz de decírselo con paz, se lo escribes y por otro lado sé buena siempre con él y con todos. Para alcanzar la paz que necesitas, no hace falta que dejes la bondad, es más, eres libre de decirle que se separe de ti si no te respeta, si sigue con la mujer esa, porque una separación matrimonial, aunque no es aconsejable, ni lo quiere la Iglesia, la misma Iglesia lo permite si la situación matrimonial es insostenible. A veces una separación calma los nervios en tensión y el hablar más de la cuenta, ayuda a poder meditar con paz, lo mejor para la vida eterna y muchas veces viene una reconciliación y regresa el amor y la paz. Alma bondadosa y que tan duramente te ha tratado la vida; ofrécele a Dios este dolor y únete a Él y a la bendita Madre de Dios. Respira tranquila y en paz y expón tu frustración, tu ansiedad y desorientación, al hombre que te enamoró y que con él contrajiste matrimonio y pídele en nombre del sentido común que sea fiel a sus promesas que libremente hizo contigo o que sea consecuente con sus hechos lascivos y te deje vivir en paz, en la paz de poder amar cada día más y mejor a Dios. Díselo y que medite y decida. Queda en paz.
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